jueves, 3 de abril de 2014
Acerca de "Fármaco"
domingo, 9 de marzo de 2014
Dos poemas de Leopoldo María Panero
que eras la muerte: porque ella sólo podía
amarme si no había
hombres para mí, vivos:
sólo ella
podía amarme: y supe también que tú eras
la muerte, y que me amabas.
El rostro de la Humanidad era
para mí el de nadie: como para ella,
como para ti: eres negra y no quieres
nada de lo que vive y no sabe
hasta morir que te desea.
Y vi a través de ti, cómo surgían
y surgen cabezas de la tierra helada:
cabezas, yelmos, corazas, espadas
es el fruto que cosecha la tierra en este año
que tanto recuerda al Último, al siguiente,
y me amaste porque yo lo veía, porque
veía crecer ya en el huerto el fruto
monstruoso que incorporaba en sí
todo dolor e injusticia y desastre
y me dijiste: «He aquí mi primer hijo
yo que nada sabía del ridículo gesto
de nacer!». Y agregaste:
«Este reirá de todo,
y lo encenagará todo con
el veneno de su risa mortal:
cuando no haya nadie
que recuerde cómo se reía, este reirá».
Y te reíste de mí, como mi madre
al ver que yo había nacido de ella.
Tan inmenso
era el frío en las ciudades
que algunos sabían que no era locura
ni es, creer que caerán —sobre mí
o seré yo el que caiga al morir sobre tu cuerpo.
Pero en el frío crecían
seguían creciendo —la peor de las alfombras
de césped— los huesos y la carne de los soldados
que crecían sobre la tierra helada. Y me dijiste:
«ellos no tendrán miedo, porque están
muertos, lo mismo que tú que me amas,
a mí que soy negra
como la vida e hice una piedra de tu gesto»
Y los muertos brotaban sobre la tierra húmeda
—cabezas, yelmos, corazas y espadas
porque la Muerte se había hecho vida.
Y pregunté
—te pregunté entonces—: «Será mi alma
buen alimento para perros?» Y contestaste: «no esperes
que ella sirva para otra cosa: fue creada
y pensada lo mismo que tu cuerpo y huesos para
nutrición de los perros finales —lo mismo
que tu palabra». «Y ¿nada he de esperar?» «Nada».
Y vi como espadas y corazas y yelmos
surgían sobre el campo más yermo.
Y me olvidé.
Leí mucho y no recuerdo nada. Y en la
habitación del fondo mi madre
se pudre, es un pez. El
palacio de la locura está
lleno de animales
verdes con
motas anaranjadas como ácidos y
cubiertos de polvo: entra,
ven.
No me acuerdo de ti, Pere
decía, creo, lo contrario, Pound
sin talento, a Paz le
gustó mucho: moscas
vuelan alrededor del árbol. Oh, yo
también devoro moscas, a veces me atraganto, tantas
hay, crudas, sí, que no resisten
la cocción (Capítulo III de
L´Alchimie rétablie de Canseliet, «So-
llicitations trompeuses et..............»),
los senos del niño. Enormes y caídos. Qui
scribit bis legit.
Y en los ojos una escalera empieza.
Y vuelvo, vuelvo como un sueño,
como los sueños vuelven, sin entrar,
vuelve a soñarme, allí. Mientras duermen,
duermen, duermen, en la Morgue
"avec les yeux grand ouverts" —vuelve
y la casa desierta, o hay extrañas
gentes que no conozco, cerebros ilegibles. Largo
el viaje por mar. Y en la habitación condenada se
encontró, muertos,
los extraños que vivían allí,
en la casa del confín (Hogdson)
sin hablar, un niño
enteramente recubierto de escamas —al tocarlo
sentimos una humedad, afilada y
fría como un cuchillo: sin conocernos. Había
también la soga colgada de una moldura
con la forma, en su extremo,
de una cabeza.
Suicidarse y seguir viviendo,
esta frase pertenece a alguien, a
Nijinski, quizá,
no estoy seguro —Largo
el viaje por mar. En una isla había
una caverna y dentro un
enano que no quiso decirnos su nombre.
Una rana le colgaba de la boca, casi lo olvido.
Y mi madre
acariciaba al niño de escamas, y de
vez en cuando retraía
la mano y la ponía
cerca de sus ojos, para mirar la humedad, las
gotas de agua fría deslizándose
sobre la piel. (Estaba
ciega como yo.) El
palacio de la locura está
lleno de agua y peces ciegos que tropiezan
en las profundidades, que relumbran. Ven, así
estás a salvo (golpeado, año tras año
por un látigo de luz, hasta la muerte), mucho menos
atroz estás a salvo: los peces
no hablan, lo mismo que los niños, no
se encadenan a una charla en la
que nadie responde ni te
responderá nunca, y que cesa
nada más formularse la pregunta —Do
I dare demasiado me atreví: sale agua
de mis ojos, y los ojos cosidos y la
boca ve y ando con los oídos. Escú-
chame tú, que pasas al lado, que me rozas
por la calle, ange à moitié mort. Que me rezas.
Cesa todo cuando se pregunta, dejan
de hablar. Se van. Guardó la
mano muerta de su hija en un vaso
con agua.
Una mosca
come en mi mano. Una lluvia de sangre
cayendo en el cerebro de Charles. Hacía
frío Fort, la noche en que murió hacía
frío, sí, lo recuerdo, llovía. Pere
Gimferrer —contrapunto
como en el canto VII de Pound —no mera
sucesión de pinceladas, narración
ciega, sino la vida
y la mente toda puestas en juego,
y perdidas— aquí. Pere
Gimferrer y Carnero se casaron
en octubre, y su hija
de enorme falo goteando,
colgando, muerta.
Balanceándose como un péndulo,
mortal, goteando, en lo oscuro.
Hay un falo en mi boca, dos, y otro
erecto en mi ano, otro
lo arrastran mis pies.
Otro
cuelga de mi cabeza y araña
al pasar las paredes y deja
un rastro, y un sonido. Pero
al morir Charles Fort dijo:
Mi hijo está desnudo, allí,
en el suelo, la llave. Y esos no son
de mi Pueblo. Oculto
donde todos me ven, sello
de la carta robada, soy una princesa.
Ven a donde huyo.
Jamás me pudieron encontrar. Dije: estaré
siempre en el bosque, perdido,
en el bosque donde nací. Llueve,
llueve sobre el sexo de una mujer. Y bajo
el sol, rodeado de muchos, tengo frío. Y dije:
«Ese que va allí,
ese que corre, que
al volverme hace una mueca,
soy yo.
Ácido disuelto
en agua
caída sobre el papel.»
ADDENDA: GLOSA A UN EPITAFIO
(Leopoldo María Panero y R.M., 2010)
domingo, 5 de agosto de 2012
un estudio sobre lo incomunicable: "Dans ma peau"
jueves, 15 de marzo de 2012
(homenaje a) Unica Zürn
Ella no logra decir ‘yo’, tampoco unir las cuatro líneas de un cuadrado como el médico le ordena. Ni abandonar la dicha de trazar una mujer cuya boca sonríe entre sus mismas piernas; está el problema de los dientes, encajarlos dentro de su cabeza o de su sexo. Así que los dibuja fuera. Se toca un poco las encías. Piensa: mis pensamientos son apócrifos. La frase se retuerce, engendra impresionante cosmos, siamés inconformista y ósmosis pasmosa. ‘Firme aquí’, le dicen. Se ve a sí misma escribir: mi nombre es látigo, y sus palabras ríen, deshacen y componen un tejido inagotable, hacen el amor consigo mismas: libero magnetismo – ágilmente sombrío – bimetalismo negro – gelatinoso mimbre – símbolo emigrante. Transforma su locura imaginaria en irracional amiga, o mala irrigación. ¿Y si el papel en blanco es ella misma, la blancura transparente de su torso que deja ver arterias, capilares, finísimas ramificaciones como un bosque de lenguaje que se agita al respirar? El médico murmura: esta mujer es peligrosa, está radicalmente viva.
(texto: R.M.)
martes, 10 de mayo de 2011
"guantánamo", de jorie graham
Luna menguante. Se alza ahora. Un crujido, se marcha. Profunda
sobre exhaustos continentes. Me asombro dice mi
plenitud. Nadie nadie dice la habitación en la que
yazgo muy quieta en la
oscuridad observando. Tu corazón dice la luna, se mengua y se alza más. Dónde está. Tu
cautela, tus ojos tu dedo índice en
gatillo tu espina dorsal tu raciocinio—preferible
rechazar el contacto,
mantener la distancia, que mane de ti la sangre y las estrellas blancas te corroan, y el espino
que es tan blanco allí en el prado,
y la arena como sábana por las extensas playas, soldados que se aprestan, la rápida
mirada al cielo cuando las palabras clave, de plegaria, antes
de la captura, son pro-
feridas, escalofrío que no contiene odio pero no es amor, es neutral, sí, ex-
angüe, por ejemplo un brote cerca de donde
una mano descierra un
cerrojo de seguridad te llama
a voces, es un ejemplo del nadie-allí, y el sonido del agua se oscurece, y el viento
agita las hierbas, y sin
un grito fluye el frío como ojos de un perro
guardián, el guardián que fija su atención en la diferencia—solo la diferencia—y actos
cometiéndose en tu nombre, tus presos que llegan
a tu centro de detención, allí, en tus
ojos, la prisión, en la profundidad de tu pupila, el ablandamiento, tú entregando toda tu aten-
ción, tus ojos, tu celda, tu cautela, tu control,
después de todo es tuyo, sí, lo que has atrapado, aférralo, aferra
esto, aquí no hay ley, no estás expuesto a
enjuiciamiento, mira todo lo que quieras, se retorcerá para ti, ahí, en esta luz que se alza,
fantasma, sin un grito, sin un grito la
el equipo jurídico los declarará exentos,
exenciones para el drenaje de los lagos, para el asesinato de los mares, los esclavos en sus
aguas, no son de nuestra especie, exención que se llama
adelante, mezcla la sangre, toma de la carne, haz caja, prende fuego, postula el ecuador, oculta
el origen, di que estáis todos perdonados, di que son sólo
técnicas coercitivas de interrogación y contrarresistencia, como en dame tu
nombre, dámelo, te lo arrancaré, te lo re-
clasificaré, te ocultaré de ti, así mismo, solo un rato, no dolerá
mucho, piensa en un jardín, aparta tu mente de las
cosas, piensa mar, viento, trueno, raíz, piensa árbol que te mantendrá
erguido, imagina que te mantiene
erguido, elige ser quien eres, deprisa, elígelo, eso ayudará. La luna es más fría
de lo que piensas. Está llena de nada como
esta nuestra quietud. Intentamos que no se fijen en nosotros. Estamos en la quietud como si
deslumbramos de inexistencia. Es un truco por supuesto pero a veces funciona. Si no lo
hace nos encontrarán, nos harán
gritar y arrastrarnos. Ansiaremos el perdón. No importa para qué, aquí no hay
hechos. Luna, ¿quién escribirá
el último poema? Tu velo echa a volar, su inutilidad hace sentir que aún
hay tiempo, ahora es cosa de dos,
me estás pidiendo que me pierda a mí misma.
En este desbordamiento de mi ojo,
lo hago.
over the exhausted continents. I wonder says my
fullness. Nobody nobody says the room in which I
lie very still in the
darkness watching. Your heart says the moon, waning & rising further.Where is it. Your
keep, your eyes your trigger
finger your spine your reasoning—also better to
refuse touch,
keep distance, let the blood run out of you and the white stars gnaw you, & the thorn
which is so white outside in the field,
& the sand which is sheetening on the long beach, the soldiers readying, the upglance
swift when the key words, of prayer, before
capture, are
uttered, a shiver which has no hate but is not love, is neutral, yes, un-
blooded, as where for instance a bud near where
a hand is unlocking a
security-catch calls
out, & it is an instance of the nobody-there, & the sound of water darkens, & the wind
moves the grasses, & without
a cry the cold flows like a watchdog’s
eyes, the watchdog keeping his eye out for difference—only difference—& acts being
committed in your name, and your captives arriving
at your detention center, there, in your
eyes, the lockup, deep in your pupil, the softening-up, you paying all your attention
out, your eyes, your cell, your keep, your hold,
after all it is yours, yes, what you have taken in, grasp it, grasp
this, there is no law, you are not open to
prosecution, look all you’d like, it will squirm for you, there, in this rising light, protected
from consequence, making you a
ghost, without a cry, without a cry the
evening turning to night, words it seemed were everything and then
the legal team will declare them exempt,
exemptions for the lakewater drying, for the murder of the seas, for the slaves in their
waters, not of our species, exemption named
go forth, mix blood, fill your register, take of flesh, set fire, posit equator, conceal
origin, say you are all forgiven, say these are only
counter-resistant coercive interrogation techniques, as in give me your
name, give it, I will take it, I will reclassify
it, I will withhold you from you, just like that, for a little while, it won’t hurt
much, think of a garden, take your mind off
things, think sea, wind, thunder, root, think tree that will hold you
up, imagine it holding you
up, choose to be who you are, quick choose it, that will help. The moon is colder
than you think. It is full of nothing like
this stillness of ours. We are trying not to be noticed. We are in stillness as f it were an
other life we could slip into. In our skins
we dazzle with nonexistence. It is a trick of course but sometimes it works.If it
doesn’t we will be found, we will be made to
scream and crawl. We will long to be forgiven. It doesn’t matter for what, there are no
facts. Moon, who will write
the final poem? Your veil is flying, its uselessness makes us feel there is
still time, it is about two now,
you are asking me to lose myself.
In this overflowing of my eye,
I do.
jueves, 10 de junio de 2010
cuestionario stalker
(Fabián Marcaccio, Re-sketching democracy -fragmento-)
.
Mientras recopilo fuerzas y tiempo para hacer algo parecido a una crónica de mi (nuestra) experiencia poético-vital con Leopoldo María Panero quiero compartir algo que mi amigo Stalker genialmente nos ha facilitado. En sus palabras: "una vuelta de tuerca sobre el cuestionario Proust; es el cuestionario Stalker, que pretende ir un poco más allá (o un poco más acá, según se mire) y ahondar en ese extraña vibración que somos", "un juguete, una plegaria y una herramienta de autoconocimiento". Os invito a hacerlo. Es producto del instante y no he corregido nada salvo un anacoluto.
He aquí su entrada en el blog, donde sería preferible que contestárais haciendo este cuestionario, los que os atreváis; los que no, espero que al menos os sea curioso leer mis respuestas: para mí ha sido un pequeño método de autoconocimiento y de autosorpresa, además de un cuestionable acto de valentía.
(Nota: he intentado poner en cursiva las preguntas para hacer la entrada más fácil de leer; y he acabado hasta las narices. Mi tirón de orejas o de aletas nasales para blogger.)
***
-¿Cuál es tu primer recuerdo?
Sinceramente no soy capaz de discernir un recuerdo de ese tipo. A veces sabores y olores me llevan a una infancia profunda de la que no recuerdo nada concreto.
-¿Qué sería lo último que te gustaría recordar antes del último aliento?
Algún abrazo sincero, sentido y mutuo.
-¿Qué te llevarías a una isla desierta?
Una memoria perfecta y muchas experiencias que revivir.
-Define intimidad:
Ese lugar al que las palabras y los gestos acceden solo de vez en cuando, y solo se puede compartir con seres muy especiales, con los que topas por casualidad.
-Tu cocina favorita:
Cualquiera menos la mía, que ahora mismo está vacía y polvorienta.
-Tu plato favorito:
Sardinas. Yummm!!
-Tu postre favorito:
Tarta al whisky.
-La película a la que te irías a vivir:
Se me ocurre "Alicia en las ciudades" de Wenders, desplazamiento y mirada interminables.
-Una película que últimamente te haya roto el eje:
Un capítulo de The Shield titulado "Kavanaugh", quinta temporada, en el que Forest Whitaker -intachable agente de asuntos internos- descubre su fragilidad personal. Por motivos de estricta identificación me quedé hecho mierda.
-El cuadro al que te irías a vivir:
"Perfil azul" de Redon. El mural "Re-sketching democracy" de Marcaccio.
-La canción a la que te irías a morir:
"The host of Seraphim" de Dead Can Dance.
-Una virtud que te gustaría poseer:
Saber hacer música: cantar bien, o tocar el bajo, o la guitarra eléctrica.
-Pídele tres deseos al genio (cuidado con lo que pides):
Primero, sodomizarlo para que no vaya por la vida regalando deseos a desconocidos. Segundo, que todos los deseos de todas las personas se cumplan sin que interfieran entre sí. Tercero, si el genio no se ha suicidado ni el mundo ha saltado por los aires, darle unas vacaciones.
-Un rincón del mundo al que te retirarías:
Tailandia o cualquier lugar imposible de asumir, donde fuera siempre extraño.
-Un animal en que te gustaría convertirte-reencarnarte:
Cualquier felino.
-Un animal que te inspire temor:
Las cucarachas, así, en plural.
-Imagina que sólo te quedan 24 horas de vida. ¿Qué harías?
Algo muy prosaico y vulgar: follar, despedirme de cuatro o cinco personas especiales, después hincharme de beber y reir con los amigos hasta que se me olvidara el plazo mortal.
-¿Qué es para ti la “noche oscura del alma”?
Perder la memoria. Acercarse a la idea de nada.
-¿Primero el huevo o la gallina?
El huevo, es más concéntrico.
-¿Fumas? ¿Bebes? ¿Algún tipo de droga?
Fumo para frotar el tiempo, tabaco y muy ocasionalmente cannabis. He probado multitud de drogas legales y LSD; prefiero no repetir. El Lorazepam no está mal, muy de vez en cuando. El alcohol me parece una maravillosa herramienta social, en su justa medida acerca a las personas. Los estados de aturdimiento inducidos son una cura de humildad frente a la confianza desmedida en el ego y en la propia razón.
- Define “compartir”:
Dar un gramo de oscuridad y recibir uno de luz, o viceversa.
-¿A qué lugar del mundo deseas viajar por encima de todas las cosas (y aún no lo has hecho)?
Ningún lugar del mundo merece ser deseado por encima de todas las cosas, creo hasta ahora.
-Tu idioma favorito (o elige uno que te guste especialmente):
El español, con todos sus acentos, por ser el único idioma que habito de verdad. El español con acento alemán me gusta especialmente.
-¿Se te ocurre alguna estrategia para contrarrestar los efectos nocivos del sistema o las “maquinarias del mundo”?
Toda forma de arte que produzca aturdimiento, extrañeza, que agite el pensamiento activo.
-Una palabra que te produzca una feliz extrañeza:
"Intensidad".
-Lo que le dirías a Dios, si existiese y llegaras hasta él, ella, ello:
No le diría nada: simplemente le miraría a los ojos.
-El cumplido que más te ha gustado de todos cuantos te han sido dirigidos:
Una persona me dijo que le recordaba a la voz de Leonard Cohen.
Otra, "...es la persona más especial que he conocido, y es muy difícil que encuentre a alguien como él".
Otra, que "como siempre, haces lo imposible inevitable" (acerca de lo que escribo).
-¿Qué superpoder te gustaría poseer?
Desaparecer, y aparecer solo en momentos de comunicación e intensidad profundas.
-Algún momento en que una película, chiste o situación hizo reír a los demás y a ti no te hizo ninguna gracia:
No recuerdo ninguno, mi humor es muy versátil, incluso en la crueldad.
-Algún momento en que una película, chiste o situación te hizo reír y a los demás no les hizo ninguna gracia:
Viéndome forzado a ver "Mar adentro", en la sala de cine empezaron a oirse sonidos de llanto en una escena muy cursi en que Bardem volaba por los aires con música de Wagner. No pude parar de reir como un desalmado...
-Una habilidad manual que te gustaría poseer:
Cocinar, pintar. Apreciar de otro modo el olor de la pintura y la comida.
-¿Ciudadano de tu pueblo, tu ciudad o tu región o ciudadano del mundo?
No soy ciudadano del mundo porque no conozco apenas nada de él, ese apelativo se lo dejo a Manu Chao. Mi ciudad y menos aún mi región significan muy poco para mí. Siendo honesto me consideraría ciudadano de Occidente, aceptando lo que supone.
-¿A qué herejía o heterodoxia te adherirías con gusto?
A los Corrupcionistas, peligrosa secta que me acabo de inventar. Su credo consiste en corromper no grandes conceptos -la Patria, Dios, el Alma- sino conceptos íntimos y pequeños: el amor, la pareja, el orgasmo, la amistad, los recuerdos.
-Haz un conjuro, ahora:
"Haz de manera que yo pueda hablarte".
-¿Crees que hay vida en otros planetas? ¿Cómo te la imaginas?
Me imagino que si. La imagino inconcebible e incompatible con la nuestra, como los seres de Lovecraft.
-¿Al amar pones el cuerpo, la mente, el alma o la raíz de lo que eres?
Pongo lo que creo que soy, y lo que voy descubriendo que soy mientras amo.
-¿Crees que hay vida en este planeta?
Solo en algunos lugares y en algunos momentos.
-Algo de lo que te arrepientes profundamente:
De todas las veces que he hecho daño a quien quería, por inconsciencia o por incompatibilidad.
-¿Qué te parece el niño que fuiste?
Un ser solitario, resentido, indefenso y triste. Las únicas cosas buenas de mi niñez -la imaginación, la capacidad de estar solo, la abstracción- las conservo, así que no tengo la más mínima añoranza de ese periodo, posiblemente el peor de mi vida.
-Un rasgo físico propio que te disguste:
He tenido siempre una relación conflictiva con mi pelo y mis orejas, aunque últimamente hemos llegado a una tregua.
-Un rasgo físico propio que te guste:
Mi mirada y mi voz, cuando miro y hablo de verdad, conscientemente.
-¿Qué opción prefieres para después de la muerte: reencarnarte, someterte a la posibilidad del paraíso, infierno, purgatorio, irte al limbo, dejar de existir?
Reencarnarme en una especie de Rilke intergaláctico, sublime, perezoso y follarín, no estaría mal.
(Rosa, oh contradicción pura, placer de no ser sueño de nadie
bajo tantos párpados.)
-¿Qué es para ti el limbo?
Me lo imagino como una pequeña roca flotando en el espacio, en la que te sientas y meditas. Otra buena opción para después de la vida.
-¿Qué regalo te gustaría recibir?
Un abrazo verdadero y sentido, por sorpresa, sin motivo aparente.
-¿Cuál es el regalo más hermoso que has recibido nunca?
Estar conmigo cuando lo he necesitado, cuando no era fácil estar conmigo.
-¿Cuál podría ser tu nombre secreto, el que verdaderamente te define?
Rubén. Lo que da verdad y secreto no es el nombre, sino quién, cómo y cuándo lo pronuncian.
-En tu opinión, ¿cuáles son los mayores males del mundo?
El miedo a sentir al otro, a conocerlo; la imbecilidad; la música de Melendi; el egocentrismo; la falta de curiosidad.
-Un “sentimiento negativo” que nunca hayas tenido (o creas no haber tenido):
La incapacidad de comprender las motivaciones ajenas, por más repulsivas que me puedan parecer.
-Un sentimiento positivo, o felicidad, que nunca hayas tenido (o creas no haber tenido):
La seguridad.
-El “sentimiento negativo” que se da con más frecuencia en ti:
La rabia contenida.
-El “sentimiento positivo” que te recorre con más frecuencia:
La curiosidad.
-¿Qué es lo que más temes?
Que mis amigos mueran antes de tiempo.
-¿Qué temías de niño/a?
Recuerdo un sueño recurrente, o algo así, en el que a medida que respiraba, en la oscuridad del dormitorio, una especie de diminuto globo iba creciendo. Era un globo de masa hiperconcentrada, que podría invadir todo si seguía creciendo. Sólo recordarlo me asusta.
-¿Qué opinión te merece el dinero?
"Su ausencia es aflicción / su posesión, herida" (Emily Dickinson)
-Algo que te parezca especialmente ridículo:
La manera en que algunas personas evitan lo que desean para ser más "interesantes".
-¿Qué estás leyendo en estos momentos?
"Chicas muertas" de Richard Calder; "Deslumbramientos" de Martine Broda; "Cenicienta en sangre" de Begoña Callejón.
-Un libro que no pudiste acabar:
"El señor de los anillos", tomo uno -y los siguientes tampoco, claro. Cualquiera del grupo poético de los 50 que no sea de Valente o el primero de Claudio Rodríguez.
-Pon el título a un libro que te gustaría escribir:
"Mimosa hostilis". Prometí escribirlo hace una semana, a unos amigos.
-Una religión que te desagrade o moleste:
El islam y el cristianismo como formas políticas, no privadas.
-Una religión (o camino espiritual) que te resulte atractiva:
El politeismo griego, su apertura, su humor, su carencia de dogmas. Dionisos.
-¿Cómo te imaginas de mayor, digamos a los 85 años?
Preferiría no estar vivo a esa edad, pues supondría haber sobrevivido a demasiados amigos. Una retirada a tiempo es una victoria. O algo así.
-¿Hay algo que censures especialmente en tus contemporáneos?
La adoración de la mediocridad.
- Algo disparatado o simpático que hayan dicho a propósito de ti o te hayan dicho a ti (a propósito de ti):
"Eres un niño bueno perverso".
-Algunas cosas que tus maestros y profesores dijeron de ti (alguna buena y alguna mala):
"Eres un amargado y te vas a suicidar cuando seas mayor" (clase de Lengua, en 7º de EGB).
"Rubén llegará a ser un gran filólogo, el mejor de su generación" (ejem...)
-¿Qué profesión te gustaría ejercer?
- Sexador de pollos. Testador de termómetros anales... ¡yo qué sé! cualquier profesión es un cáncer.
- ¿Cuál es tu medio de transporte favorito?
El metro me gusta por su subterraneidad. Si conduzco yo y conozco la ruta, el coche, con mi buena música.
-Nombra tu demonio interior:
La muerte de seres cercanos.
-Nombra tu “ángel” interior:
La cordialidad.
-¿Qué crees que es el universo?
El globo de masa insoportable que he mencionado en mis pesadillas infantiles.
-Imagina a un antepasado tuyo hace 2000 años. Di algo de él/ella:
Una especie de cortesano encantadoramente inútil.
-Tu período histórico favorito:
La guerra fría tiene un morbazo, si supiera me vestiría de agente de la Stasi para sembrar el miedo entre los contrarrevolucionarios.
-Una serie de televisión que te haya enganchado:
House, Twin Peaks, A dos metros bajo tierra, la primera temporada de Heroes... soy fácilmente enganchable.
-Un personaje de dibujos animados que te resultara especialmente querido:
Ryoga, de Ranma 1/2: ese personaje que carecía de sentido de la orientación y se transformaba en cerdito si le caía agua.
-Si tuvieras la posibilidad de viajar en el tiempo y encontrarte a solas con Adolf Hitler niño, ¿qué harías?
Como nadie lo ha dicho, lo digo yo: le mataría.
-Alguna idea “práctica” para mejorar el mundo:
Poner música de peli porno setentera a las retransmisiones del Congreso de Ministros.
-¿Cómo te defines en lo político?
Polpotista moderado: exterminar a un tercio de la población, pero de buen rollo.
-Si tuvieras que elegir entre salvar al hombre y exterminar a los animales o salvar a los animales sacrificando al hombre, ¿por qué opción te decantarías?
En contraste con la respuesta anterior, no me avergüenza decir que salvaría al hombre (si por hombre entendemos a muchos hombres y mujeres). Eso sí, las mujeres primero y los miembros de la SGAE los últimos por detrás de las babosas y las hienas.
-Una razón o circunstancia por la que darías tu vida sin dudarlo:
Salvar la vida a alguien que amo.
-¿Qué opinión te merece el país en que vivimos?
Es un país donde se alaba la mediocridad, se la necesita y se la ama. La brillantez es mirada con lupa y puesta en cuestión sin piedad. Solo he vivido en este país así que no sé si los demás son así.
-¿Avanzas o retrocedes, creces o menguas?
Intento crecer permaneciendo; se avanza por mí.
-Escribe tu epitafio:
"Amó y conoció a los de su especie".
-¿Qué misterio contemplarías indefinidamente?
Un cuadro de Rothko, su sonido.
-Un filósofo o pensador con el que te irías a pasear:
Spinoza.
-Un filósofo o pensador con el que te irías de fiesta:
Deleuze.
-Un filósofo o pensador con el que jugarías al escondite:
Freud.
-¿Para qué poetas en tiempos de miseria?
Para sustituir esa pergunta por otras aún más urgentes.
-Canoniza a alguien, ahora mismo.
A nadie. Las personas que se me ocurren me odiarían si las canonizara.
-¿Qué canción te gustaría ser?
"Behind the wheel" de Depeche Mode. No la versión single sino la del Music for the Masses.
-Como éste es el cuestionario Stalker, di alguna palabra o adjetivo que te parezca que define o nombra a un Stalker.
Búsqueda.
-¿Qué es el tiempo?
Algo que debe ignorarse para ser soportado.
-¿Te gustaría ser eterno?
Ya lo soy, en tanto que no puedo concebirme sin existir.
-¿Qué harías si vivieras mil años?
Amar a muchas personas. Buscar el asombro aunque lo haya visto todo.
-¿Qué opinión te merece la esquizofrenia y otras enfermedades mentales? ¿Cómo te colocas ante ellas?
En parte realidad, en parte (mucho menor) creación o consecuencia de la psiquiatría. Pese a esto, creo que realmente se puede paliar el sufrimiento y salvar incluso vidas con una simple medicación. No tengo una óptica romántica acerca de la locura, por más atractiva que pueda parecerme.
-Cuenta un sueño en tres líneas (o cuatro, o…):
Soy una mujer rubia y toco el violín; siento que tengo pechos; es la primera vez que escucho música dentro de un sueño.
-Cuenta una pesadilla en tres líneas (o cuatro, o…):
La tuve de pequeño: el sol ha explotado y la Tierra se ha sumido en una noche perpetua. Solo se puede vivir bajo tierra. En la radio van diciendo el número de supervivientes que hay en cada país: en Rusia había cinco.
-¿Dónde buscarías consuelo: en un bosque, en un templo, en un regazo, etc.?
En una mirada.
-Una oración por los hombres (puede no ser religiosa en sentido estricto):
Aprended a destruiros y a ser desde el principio, con nuevos ojos.
-Una oración por los animales:
Seguid siendo como hasta ahora.
-Una frase célebre que te resulte falsa o hueca:
"La familia es lo que al final nunca te falla".
-Una frase leída recientemente que te haya hecho pensar:
No leída, sino escuchada: I'll never know just how the blind can lead the way ("nunca comprenderé cómo pueden ser los ciegos quienes van por delante en el camino"), de la canción "Shades of God" de Paradise Lost. Perfecta para nuestros dirigentes, oposición incluida, por supuesto.
-Imagina que, contra todo pronóstico, existe el infierno y que éste adopta una forma distinta para cada ser. ¿Cuál es el infierno al que más temerías llegar?
Un instituto de barrio marginal con jornada laboral de 12 horas diarias y padres aún peor que los alumnos.
-¿Tienes un animal en casa? ¿Cuál es tu juego favorito con él?
Por desgracia no tengo. Si tuviera un gato jugaría a dejar que durmiera sobre mi pecho.
-¿Qué haces cuando no encuentras tu propio centro?
Rondar por sus bordes, en círculo.
-Una enseñanza de tu abuelo/a:
Guardar las llaves en una bolsa de pipas Churruca totalmente desteñida hasta lo transparente -nunca entenderé por qué las guardaba ahí, me quedo con ese misterio.
-¿Qué opinión te merece esta encuesta?
Indagación, generosidad.
-Añade una pregunta y respóndela tú mismo/a:
¿Quién eres? Quien puedo.