Finalmente había aceptado que necesitaba a Carlos en mi vida, el sexo que tenía con él lo sentía tan intenso, tan caliente, quizás fuera la situación, la edad, no sé qué, pero con Toni, me encantaba hacerlo pero sentía que teníamos encuentros muy tiernos, muy románticos, disfrutábamos del sexo, pero a la vez sentía que una parte mía deseaba algo más fuerte, necesitaba lo que tenía con Carlos, los encuentros con él eran cada quince días más o menos, tratábamos de encontrarnos e ir al hotel, creo que nadie sospechaba nada de nuestra relación en el departamento, tenía miedo que alguien nos viera cuando entrabamos o salíamos del hotel, pero lo superaba con tranquilidad. Carlos quería que hiciéramos algo más, me decía que tenía un amigo que quería que conozca, habían compartido aventuras con otras mujeres, siempre sacaba el tema en plena faena cuando los dos estábamos muy calientes
-Quiero que conozcas a mi amigo… seguro se van a llevar bien… ni te imaginas la colección de vecinas del barrio que tiene… se vuelven locas con él…
-Si… que es un super dotado…?
-Yo lo veo muy parecido a mi… pero cuando era más joven claro… anda en los cuarenta y pico… y con una perra como vos se va a volver loco…
-Vos no me queres coger más…?-le dije, justo me la estaba sacando de mi conchita, en cuatro en la cama y empezándola a meter en mi culito, estábamos en el cuarto del hotel, me encantaba como su tremendo miembro se iba abriendo paso en mi culito- porque me encanta como me haces la cola… y no necesito nadie más…
-Cuando lo conozcas después vemos…
-Y si no lo quiero conocer…
Dejamos de hablar, me había hecho una colita con el pelo y me seguía dando bien duro en cuatro, mis tetas se sacudían con los movimientos de la cogida, giré la cara y lo mire con cara de puta
-Me vas a llenar la colita de leche…?
-No tenes que salir con Toni… cuando te vas de acá…?
-Me limpio un poco antes de irme… y cuando esté con él voy a estar bien caliente sabiendo que tengo la colita llena de tu leche… -le dije con mucha voz de puta, me cacheteaba el culo, me tomó de la cintura y me daba bien duro, hasta que sentí como se clavaba bien a fondo.
-Si déjame tu leche… toda papi… toda… que rico…
Toni me llevó a cenar, me sentía caliente habiendo cancelado nuestra salida para verlo a Carlos, mi culo me molestaba un poco, pero me encantaba sentir esa sensación.
-Como fue el estudio amor…?
-Bárbaro… por suerte avanzamos bastante… creo que nos va a ir a todos bien… vos que hiciste…
-Y me empezó a contar aburridos detalles de su partido de fútbol, lo miraba sonriente, después de cenar fuimos a tomar algo y a casa. El domingo, cada uno fue a casa de sus padres.
La relación con Toni parecía seguir por los carriles normales, todo el tiempo tenía la duda si él no sospechaba nada, sino notaba nada raro en mí, creo que algo se me debería notar, pero si lo notaba, nunca había hablado del tema y se comportaba como si nada pasara, como dije no creía que a él le atrajera la idea de que le metiera los cuernos así que supuse que en realidad no sospechaba nada, algunas veces me sentía culpable, pero como dije al principio necesitaba ambas relaciones.
Una tarde volví del trabajo, había un señor parado al lado de Carlos, lo reconocí, lo veía habitualmente en el edificio y por el barrio, era el plomero que reparaba en muchos de los edificios de la zona, Carlos me llamó.
-Señora Daniela… el señor es Ricardo, es plomero gasista… si usted puede ahora… sino cuando pueda… o arregle con su marido… necesita revisar los artefactos de gas y que no haya perdida en su departamento, el consejo de administración quiere que se revisen todos los departamentos, hace unos años tuvimos una perdida y estuvimos seis meses con corte, no quieren volver a pasar por lo mismo…
-Ahora no tengo tiempo… tengo que salir… podrá pasar en otro momento… -el Sr. Hablo
-Es solo un rato señora… no tengo que arreglar nada… más que nada revisar… y si hay algo que reparar vuelvo en otro momento…
-Pasa que tengo que salir… voy a estudiar con unas amigas… si no demora mucho como ud dice puede venir mañana a esta hora… cuando llego del trabajo… tengo un rato…
-Bueno trataré de pasar mañana, le confirmo con Carlos…
-Perfecto… -le dije, subí a casa dejé las cosas, me arreglé un poco y salí, estaba sólo Carlos abajo, no había nadie más en el hall.
-Sra Daniela… -me llamó.
-Si Carlos… digame… -dije acercándome a él, me habló bien bajo.
-El sr Ricardo es el amigo del que le hablé… él no sabe que ud es la hembrita con la que salgo… le conté que tenía una amiguita que me estaba comiendo… que quería que la conozca… pero no sabe que es ud… -se cayó la boca, bajaba el ascensor, era Mirna, una vecina mayor del séptimo que siempre parecía enojada. Carlos levantó la voz, para que ella oyera también.
-Le puedo confirmar al gasista señora entonces que venga mañana a esta hora más o menos…?
Sentía un nudo en la garganta, la señora paso al lado mío saludándonos secamente, cuando salió le dije.
-Yo no pienso hacer nada con él… estás loco…
-No señora… tiene que revisar las instalaciones de gas… -bajando la voz me dijo- hacele un showcito como me hiciste a mi… seguro le va a encantar… es muy educado él también…
-Ud, está loco… -le dije dándome vuelta y saliendo del edificio, me costaba concentrarme cuando estaba estudiando, era un tipo flaco, fibroso, manos de trabajador, me empecé a excitar con la idea de exhibirme para él también, esa noche hice el amor con Toni que otra vez me remarcó lo caliente que yo estaba, le dije que me molestaba mucho que siempre me dijera eso,
-No entiendo… te molesta que me caliente haciendo el amor con vos…
-No amor… lo que pasa es que en general no estás tan caliente…
No hablamos más, interrumpimos el acto, me di vuelta y me acosté a dormir, él me apoyó desde atrás, yo seguía muy caliente, pero gire mi cabeza y le dije.
-Ya está amor, durmamos, que mañana tengo un montón de cosas que hacer en el laburo, tengo que estudiar… durmamos… -le di un beso, cuando me pareció que se durmió me estuve acariciando un rato, me sentía caliente.
A la mañana siguiente me vestí más producida que de costumbre, tenía una camisa que me queda muy ajustada y que marca mis pechazos, se transparenta y se nota un poco el sujetador, que era uno blanco de encaje, una mini, que marca mucho mi culazo, unos zapatos de taco blancos también, pensaba en el regreso a casa, me sentía sucia, traicionera con Toni, pero más que nada caliente. En el ascensor Toni me dijo,
-Que producida estás…
-Si amor… tengo una reunión importante hoy… vienen unos tipos de otra empresa… -mentí sin que se me moviera un pelo.
El día en el trabajo se me hizo interminable, cuando viajaba en el subte ya estaba caliente pensando en el encuentro, antes de entrar vi desde afuera que el gasista estaba parado al lado de Carlos, que estaba sentado en su escritorio, desbroché dos botones de mi camisa, se notaba el canal de mis pechos, me sentí caliente, entré al edificio, me pareció que Carlos tenía una leve sonrisa, camine sensualmente hacia ellos.
-Sra Daniela buenas tardes… puede pasar el sr Ricardo… es sólo un rato…
-Si claro… un rato tengo… tengo que ir al gimnasio… pero un rato tengo…
Caminé hacia el ascensor, seguro que notaba como el tanga se marcaba en mi minifalda, él abrió la puerta y pasé, quedé de frente a él, que un par de veces miró el canal de mis pechos tratando de disimular. Abrió la puerta del ascensor y pasé casi rozando su brazo con mis pechos, abrí la puerta y pasó.
-Quiere tomar algo… -le pregunté.
-No le agradezco señora… -le mostré donde estaba el termotanque en el lavadero.
-Empiezo por el termotanque entonces… -dijo estuvo revisando, pasó después a la cocina, tenemos una estufa tiro balanceado en el comedor, acomodé el espejo de la puerta del placard para que pudiera verme desde ahí. Me desabroché un botón más de la camisa, estaba en la cocina.
-Acá en el comedor está la estufa… yo me tengo que cambiar que tengo que ir al gym… si no le molesta…
-Haga tranquila señora…
Cuando escuché que pasaba, empecé a desnudarme, no miraba para donde él estaba, me saqué la camisa, la mini, estuve un rato en ropa interior, por momentos delante del espejo, por momentos me alejaba, cuando me alejaba me acariciaba un poco mi conchita, me sentía caliente, me saqué el corpiño y me paré frente al espejo, me miré de frente, de perfil, me puse un top que uso sin sujetador y una calza de las que uso, me puse las zapatillas y salí hacia le comedor, me pareció que el sr estaba colorado, note que tenía un bulto muy grande, traté de mirar disimuladamente.
-Le falta mucho… Ricardo era su nombre no…?
-Si… y ud es Daniela… la tengo vista del barrio…
-Ah mire… lo vi a ud también alguna vez por el edificio…
-Si suelo arreglar en este y en otros del barrio…
-Y encontró todo bien…?
-El termo tanque me parece que no está bien… habría que revisarlo más a fondo… si tienen a alguien de confianza…
-Y ud lo puede revisar…?
-Claro… lo reviso a fondo sin cargo y si hay algo que arreglar le paso un presupuesto…
Me sentía tan caliente después de haberme exhibido así para él, tenía que irme al gimnasio, además no sabía qué hacer, no iba a regalarme así en mi casa.
-Prefiere venir un día que esté mi pareja… así habla con él que seguro entiende más si le tiene que explicar algo…
-En realidad le puedo explicar a usted y se lo transmite a él… no hace falta que esté él…
-El jueves puede venir…? No voy al gimnasio y se fija… a esta hora más o menos…
-Si ud puede señora encantado…
-Lo espero entonces…
Bajamos en el ascensor, me puse en puntas de pie y me miré mi culo en el espejo del ascensor sacando culo, el no hizo nada pero miré por el espejo como se notaba ese bulto en su pantalón, salí y me miré en los espejos del hall,
-Buenas tardes Carlos, adiós sr Ricardo… -salí caminando sensualmente, entrené bien duro, me sentía tan caliente.
Cuando volví, Carlos me esperaba, subió conmigo en el ascensor, lo paró entre dos pisos y me atrajo hacia él manoseándome el culo bajando mi calza, haciendo que me mirara en el espejo.
-Que puta sos… le dejaste la verga bien dura… me contó el show que le hiciste no se perdió detalle…. Estaba encantado… -me manoseó las tetas, me besó, me apretó el culo. Me subió la calza, cerró la puerta del ascensor que arrancó nuevamente, abrió la puerta de mi piso, me apretó el culo antes que bajara.
-Estás cada día más fuerte… te hace bien el gimnasio… -le sonreí, entré directo a casa, Toni estaba jugando a la play, ni siquiera registró que había llegado. Estaba caliente pero no pensaba buscarlo a él, el jueves veré cuan caliente me pongo, pensé, me fui a bañar, en la ducha me estuve tocando recordando cómo me había encantado exhibirme para el señor, preparé la cena. Toni seguía jugando.
-Ya cené… te dejé un plato para calentar… ni te diste cuenta que llegué…
-Perdón amor… me colgué jugando…
-No hay problema… me voy a acostar tuve un día duro…
Me caliento con el encargado del edificio, señor mayor 5
0 comentarios - El encargado me quiere compartir...