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Doble vida (4)

Mi hermana estaba en mi cuarto y  yo sentado en mi silla gamer mirándola como si se tratara de una esculturamilenaria. No podía creer lo que mis ojos veían. Los nervios se apoderaron demí y como pude esbocé:
-       Pa.. pasá y ce…cerrá - le dije tartamudeando
-       ¿Estas nervioso?  – me preguntó con un atisbo de sonrisa
Ella me preguntaba a mí. No podíadejar que tomara el control. No debía permitírselo.
-       Sentate en mi cama
-       Si, dijo ella
Se sentó con las piernas cerradasy yo, aun sentado, giré mi silla de la computadora para verla de frente.
-       ¿Viniste sin bombacha? – necesitaba ser directopara sentirme más seguro
-       Si
-       ¿Segura?, ¿no me mentís? - insistí
En ese momento mirándome a losojos, como si de la película atracción fatal se tratara, abrió lentamente laspiernas y levantó una para mostrarme su depilada concha. Juro que traspirabacomo el detective gordo de la película y que ella me miraba desafiante comoSharon Stone. Solo que a ella se la notaba más seria y menos confiada.
-       Muy bien - dije en un tono que intentó parecerfirme
-       Total, ya me la viste en las fotos, ¿no? - dijoella
-       Si – fue lo único que atiné a responder
Cerró las piernas y las cruzó.Estuve tentado de pedirle que las abra, pero quería demostrarle que el controllo seguía teniendo yo.
Es el día de hoy que no entiendo cómome animé. Solo esa adrenalina que vivía en ese momento, podía explicar lo quehice a continuación. Me levanté y me coloqué delante de ella con el bulto de mipija visiblemente erecta, delante de ella.
-       ¿La vas a probar?
-       Sacala - me dijo ella
No dudé y le ordené.
-       Sacala vos
Me miró a los ojos como tratandode entender en quien se había convertido su hermano. Una sonrisa perversa seapoderó de mi cara, como el villano perfecto de una película. La heroína estabacasi derrotada a los pies de él, que sonreía maliciosamente.
Creo que no debo sufrir ningúntipo de cardiopatía porque de haber sido así, en ese momento me moría. Elcorazón nuevamente latía a mil ¿Cuántas veces ya en un día? No importaba
Mi dulce hermanita, sentada en micama, con su carita de ángel. Esa sumisa chica, estudiosa y religiosa a mas nopoder, estaba con su mirada clavada en la mía y ahora bajándola lentamente paradesabrochar mi cinturón.
Yo la miraba desde arriba y metentaba acariciarle el pelo, la cara, la boca, pero sabía que no debía hacerlo.No debía mostrarme débil y complaciente porque ella iba a saber aprovecharlo.Era muy arpía, había que tener cuidado con ella.
Con sus dedos delicados tomó micinturón y lo fue sacando. Lo hacía todo muy lentamente y eso lo volvía másmágico, más irreal. Desabrochó la hebilla y lo apartó a un costado. Volvió sumirada a mis ojos. Yo la miraba serio. Un poco por mis nervios y otro poco parano mostrar indicios de placer. Desabotonó y me miró nuevamente. Se detuvo comoesperando una nueva indicación de mi parte
-       Seguí – le dije cortante
-       Bueno
Fue bajando el cierre lentamentey de a poco fue abriéndome la cremallera para liberar la zona. Una mano me tocópor encima del calzoncillo y vio que estaba en una semi erección. No eracompleta producto de los nervios, debía relajarme. Volvió a mirarme
-       Sacala - le ordené
-       Bueno - me dijo sumisa
Ahora sí, metió la mano dentro,bajando el elástico y tomó mi verga firmemente con su delicada manito deprincesa. Evidentemente sabía lo que hacía, no era la primera vez. La sopesó yretiró la piel hacia atrás. Volvió a mirarme y miró mi pija. Empezó a subir ybajar la piel pajeándome de una manera deliciosa. Sabía que estaba lograndocontrolarme, pero yo fui más fuerte esta vez
-       No te pedí que me pajearas
-       Bueno
La mantuvo en su mano y me miróesperando la siguiente orden, que no tardó en llegar
-       Metétela en la boca
No me respondió, me miró a losojos, abrió la boca y sosteniéndome la mirada como una auténtica geisha semetió lentamente mi pija en la boca. Cerro la boca y me miró con la vergaadentro. Yo le sonreí maliciosamente.
Tuve tiempo para detenerme apensar en todas las maldades y desplantes que me había hecho en el últimotiempo y le sostuve la mirada un tiempo largo.
Ella, mi hermana, la casta, lapura, la inmaculada, estaba ahora con la mitad de mi pija dentro de su boca. Leacaricié el pelo, no pude evitarlo. Ella se sonrió con mi verga dentro. Unabatalla pequeña había ganado, pero no le duró mucho
La agarré fuerte del pelo y latiré hacia atrás para que salga un poco de mi verga de su boca y volvía aempujarla, siempre agarrándola bien fuerte de su hermoso y castaño cabello,hacia adelante con fuerza. Hizo una pequeña arcada. La saqué y la tiré paraatrás. Mi pija estaba más erecta que nunca en su vida, creo que nunca habíaestado así. Sentía hasta un leve dolor de lo dura que estaba. Mis huevostambién se contrajeron. Le saqué la pija y empecé a pasársela por toda la cara.Un poco de saliva de ella y otro poco de líquido pre seminal se esparcían porsu cara.
Noté que en determinado momentoen que le estaba pasando la pija en la cara, se olvidó que era su hermano, suamo y que ella era mi sumisa esclava. Con sus dos manitos apoyadas sobre susmuslos y mirando fijamente mi verga, la siguió con la mirada y abriendo la bocase la volvió a meter y comenzó a chuparme con desesperación
Iba a acabar, y lo iba a hacer enlas fauces de mi hermana.  La agarré delpelo y moviéndole la cabeza comencé a cogérmela por la boca.
Ella abría más la boca y sedejaba hacer. Quise ponerla a prueba y la solté. Fue entonces que sucedió.Agarró mis caderas y comenzó a chuparme, ahora sí ella a mí, con toda devoción.Esa misma devoción que sentía por Dios, ahora la tenía por mi pija. Chupabacomo desesperada. En ese momento entendí que mi hermana era una auténtica diosadel sexo. Una puta hermosa. En la intimidad, era la mejor y lo daba todo.Siguió chupándomela y le dije
-       Te voy a acabar en la cara
Quería humillarla y ultrajarla,pero en un momento noté que no era nada nuevo esto que le iba a hacer a mihermana. Aun así, mi excitación pudo más y la volví a agarrar del pelo,sacándole la pija de la boca. Ella pareció entender lo que venía y comenzó apajearme con la boca abierta y mirándome a los ojos
Ese contacto visual lo fue todo. Mevenía en un orgasmo irreversible
-       Tomá - dije con voz firme
Ella cerró la boca para recibirmi leche en su cara. Un primer potente chorro cruzo su boca, nariz y ojoderecho. El segundo, más largo aún, en nariz y ojo izquierdo que permanecíacerrado. El tercero ceja, frente y parte del pelo. El cuarto, un poco menoscaudaloso, en la boca nuevamente.
Me agarré la pija y se la pasépor toda la cara esparciéndole el líquido elemento. Ver su cara llena de misemen me produjo una oleada de placer extremo. Era una gran locura, lo sabía,pero me sentía en un éxtasis total.
Ver a mi hermana sometida yhumillada por mí, no tenía precio. Ver su cara llena de mi leche me llevaba alos límites del morbo. Era mi hermana y aun así no sentía culpa. Se merecíaesto y mucho más.
-       Alcanzame un pañuelo descartable - dijo ella
-       Acá las órdenes las doy yo - dije firme
-       ¿Qué más queres que haga? - Preguntó en un tonoque mostraba preocupación
Seguro por su cabeza pensaba¿hasta dónde piensa llegar mi hermano? O ¿Por qué habré sido tan cruel con él yahora tengo que pagar así?
Agarré la caja de pañuelos, saquéuno y se lo alcancé. Lo tomó y sin abrir los ojos se lo pasó, primero por lospárpados y ahí sí, abrió sus dos ventanas y esos ojos no parecían tristes.Destellaban algo que me costaba identificar. Me miró con intensidad.
-       ¿Me podés dar otro pañuelo, por favor?
-       Tomá - le dije alcanzándole otro
No podía creer la sumisión de mihermana. Me pedía las cosas por favor y se limitaba a hacer lo que le pidiera.
-       Otro, porfi - dijo con cara de nena buena
Juro que ahí mismo, con la caraaún con semen, me hubiese abalanzado a besarla y chuparle la boca, meterle lalengua, chuparle los ojos. Solo veía a una nena dulce que pedía ser contenida.Esa palabra “porfi” me desarmaba, pero tenía que ser fuerte.
Ella pareció notar que algocambiaba en mi gesto y ya no estaba tan duro como antes y quiso ir por el mismolado.
-       ¿Me das otro, hermanito?
Casi me desmayo al oír“hermanito”, pero por suerte pude recomponerme y me giré sentándome en lasilla, tiré los pañuelos en la cama a su lado y me puse a mirar la computadoradiciendo
-       Ahí tenés, límpiate y Andate a tu cuarto
Me miraba y yo podía sentir lacarga de su mirada en mi espalda, pero no claudiqué. Se terminó de limpiar y separó diciéndome
-       Chau
-       Cerrá la puerta - dije sin dejar de mirar lapantalla
Ya era tarde. Había humillado ami hermana acabándole en la cara. Era momento de dormir y descansar. Todo habíacambiado. En este juego de roles, ya no iba a ser yo el humillado y sometido.Ahora yo empezaba a ser el dominador y ella la dominada.
Me dormí con una sonrisa deplacer como nunca antes lo había hecho
 
(continuará…)
Pueden dejarme sus comentarios enreybaco2005@hotmail.com
O en Telegram @reybaco2005

5 comentarios - Doble vida (4)

fenix7192
Muy buen relato me dejó a mil ojalá tener una. Hermana así para disfrutarla van los 10 esperando seguiente parte
soretin3
gracias Fenix
geferman +1
Ya he visto varios tuyos y este está a la altura o mas
soretin3
Gracias geferman
iZuNaX
Juro que es de esas pocas historias que les tienes poca fe pero terminan dándote una sorpresa increíble y mejor cuando tienes casi todos los capítulos disponibles muy buen relato la verdad
soretin3 +1
Gracias iZuNaX
Te mando un abrazo
iZuNaX
@soretin3 un Abrazo igualmente y sigue así que tenés joyas muy buenas
PeladitoX69
Muy bueno, me exita y me pajeo
soretin3
Gracuas Peladito
jstronger
Tremenda la vendeta del maestro. Aca poniendome al día 💪🏼
soretin3 +1
Hola J apareciste! se te extrañaba, pensaba que me habías abandonado
jstronger
No tenia mucho tiempo como para ponerme a leer, pero los tengo todos en favoritos y me estoy poniendo al día 😁
soretin3
Vamosss neneeee