No te digo que estaspelirrojas amigas mías son implacables. María Teresa que agarra cualquiercumpleaños. Y Estela que no se queda atrás. En efecto, la delgadita tuvo laidea de ir a ver a María Clara, a quien vio en sus reuniones y con quien Teresatiene habitualmente travesuras de todo tipo. Estela la llamó un día de semana cercadel mediodía, le dijo mimosa de visitarla llevándole algo para almorzar,Clarita, bastante gaucha, le dijo sí y la otra excitada le mandó besote y ledijo que se pusiera muy linda que la iba a pasar bien. Clara intuyó lo quevenía y se vistió y maquilló para Estela. Y ésta, ni te cuento: campera decuero, pulóver fino, pollera negra, tacos altos, bañada, perfumadísima, muymaquillada, con la cartera fina de cuero bien cargadita de juguetes y elementospara bajársela. Estela se puso cremita para las manos, para excitar más a suconocida, ni siquiera amiga, y fue en colectivo hasta acá en Carapachay.
Llegó, la saludó, sebesaron normal y Estela la elogió a María Clara por lo linda y maquillada, yella también a su visitante. "Mmm, mi amor, qué linda estás, quépaqueta", le dijo Clarita mimosa. Estela llevó fiambre y las dos mujeresalmorzaron sandwiches, y luego Clara la sorprendió con postre, no sé cuál peroque a Teli le encantó. Charlaron, se mimaron, besito, cosita, y para irponiéndola lista Estela le empezó a preguntar por su vida sexual, la otra lecontó intimidades con Teresa y compañía. Y loca de caliente, Estela le propusoir a la habitación a seguir charlando del asunto, genia, estratega. María Claralavó y acomodó todo, le dijo sí cariñosona a Estela y las dos para la pieza.
Y ahí lo de siempre.Besos, mimos, caricias, piropos, Clara que excitada le decía a Estela que legustaba también con ella no estando María Teresa. Estela agarró viaje, le dijocositas, que vas a ver cómo te doy, que esto, que el otro. Y en menos que cantaun gallo, la de Olivos se desnudó rápido y le empezó a sacar a su amiguita.Clara se excitó mal, jadeó, se volvió loca con la anatomía de Estela, con quiennunca había intimado. Le sacó el corpiño y le pegó una de apretones en lastetas. "Ahora vas a debutar conmigo amor", le dijo Estela hirviendode calentura, y se sacó la bombacha y se la tiró a Clara en la cara. Y ni tecuento la excitación de Clara cuando Estela le desprendió el corpiño, leapretujó terrible sus tetas y luego Clarita se quitó su fina bombacha.
Y Estela la violó yreventó con una furia tremenda, y eso que no es gorda, sin embargo la hizogritar de placer y excitación, castigándola sexualmente con una buenacepillada. Juguetes, elementos, vibrador, lápiz de labios, de ojos, cuchillitode untar, Estela le metió todo lo que pudo, hasta sus dedos terminados enlarguísimas uñas. Clara acabó su flujo, bañó su cuerpo y el de Teli, que labañó a ella y se bañó acabando al mismo tiempo. Ahí sí que las mujeres entraronen locura total y se dieron la una a la otra varias veces más, vagina, cola,ambas vías, tetas, lengua, chupada de clítoris, masturbación al por mayor. Masa total. Estelita cogió y fue cogida porsu nueva mujer, y ambas disfrutaron total. Pero falta la última…
Cuando terminaron y MaríaClara salió del baño lavada y cambiada, e iba a la cocina a tomar algo parareponerse, Estela apareció de la nada, en corpiño y bombacha, de atrás lasujetó, manoseó, le dio un par de chirlos para calentarla, Clara se dejó yEstela la aplastó contra la heladera, le bajó la pollera, la bombacha nueva yle metió de nuevo un juguete largo y grueso. Clara gozó, gimió, gritó y las dosacabaron una vez más, ahora paradas contra el refrigerador. Después sí,Estelita, zorra, divina, la besuqueó a su nueva chonga, bien en la boca,leagradeció por el almuerzo, Clara también y arreglaron para verse y estar juntasen cualquier evento, como si no les bastase la garchada. Es que estas mujeres,se sabe cuándo empiezan, pero nunca cuándo acaban.
Llegó, la saludó, sebesaron normal y Estela la elogió a María Clara por lo linda y maquillada, yella también a su visitante. "Mmm, mi amor, qué linda estás, quépaqueta", le dijo Clarita mimosa. Estela llevó fiambre y las dos mujeresalmorzaron sandwiches, y luego Clara la sorprendió con postre, no sé cuál peroque a Teli le encantó. Charlaron, se mimaron, besito, cosita, y para irponiéndola lista Estela le empezó a preguntar por su vida sexual, la otra lecontó intimidades con Teresa y compañía. Y loca de caliente, Estela le propusoir a la habitación a seguir charlando del asunto, genia, estratega. María Claralavó y acomodó todo, le dijo sí cariñosona a Estela y las dos para la pieza.
Y ahí lo de siempre.Besos, mimos, caricias, piropos, Clara que excitada le decía a Estela que legustaba también con ella no estando María Teresa. Estela agarró viaje, le dijocositas, que vas a ver cómo te doy, que esto, que el otro. Y en menos que cantaun gallo, la de Olivos se desnudó rápido y le empezó a sacar a su amiguita.Clara se excitó mal, jadeó, se volvió loca con la anatomía de Estela, con quiennunca había intimado. Le sacó el corpiño y le pegó una de apretones en lastetas. "Ahora vas a debutar conmigo amor", le dijo Estela hirviendode calentura, y se sacó la bombacha y se la tiró a Clara en la cara. Y ni tecuento la excitación de Clara cuando Estela le desprendió el corpiño, leapretujó terrible sus tetas y luego Clarita se quitó su fina bombacha.
Y Estela la violó yreventó con una furia tremenda, y eso que no es gorda, sin embargo la hizogritar de placer y excitación, castigándola sexualmente con una buenacepillada. Juguetes, elementos, vibrador, lápiz de labios, de ojos, cuchillitode untar, Estela le metió todo lo que pudo, hasta sus dedos terminados enlarguísimas uñas. Clara acabó su flujo, bañó su cuerpo y el de Teli, que labañó a ella y se bañó acabando al mismo tiempo. Ahí sí que las mujeres entraronen locura total y se dieron la una a la otra varias veces más, vagina, cola,ambas vías, tetas, lengua, chupada de clítoris, masturbación al por mayor. Masa total. Estelita cogió y fue cogida porsu nueva mujer, y ambas disfrutaron total. Pero falta la última…
Cuando terminaron y MaríaClara salió del baño lavada y cambiada, e iba a la cocina a tomar algo parareponerse, Estela apareció de la nada, en corpiño y bombacha, de atrás lasujetó, manoseó, le dio un par de chirlos para calentarla, Clara se dejó yEstela la aplastó contra la heladera, le bajó la pollera, la bombacha nueva yle metió de nuevo un juguete largo y grueso. Clara gozó, gimió, gritó y las dosacabaron una vez más, ahora paradas contra el refrigerador. Después sí,Estelita, zorra, divina, la besuqueó a su nueva chonga, bien en la boca,leagradeció por el almuerzo, Clara también y arreglaron para verse y estar juntasen cualquier evento, como si no les bastase la garchada. Es que estas mujeres,se sabe cuándo empiezan, pero nunca cuándo acaban.
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