Buenas noches personas, regresé para continuar con los relatos de vacacionales.
Les dejo el anterior para que lo disfruten.
Paula: http://www.poringa.net/posts/relatos/3485185/Paula-Shemale.html
Como segundo destino de vacaciones estoy en Bogotá, llegué el Domingo en la mañana ya que conduje de noche luego del encuentro el Sábado, el lunes lo tomé para conocer un poco la ciudad durante todo el día, en la noche, ya en el cuarto del hotel, entré a Mileroticos y encontré a esta divinidad. Alondra.
Como pueden notar, es un verdadera hembra, Tetona, culona, hermosa y buena verga, Sin perder mucho tiempo contacté con ella, quedó la cita para el martes a las 4 de la tarde. En este momento son las 11 pm del martes 15 y aún mi cuerpo está ardiendo por este gran encuentro.
Al llegar casi la hora prometida, luego de toda la mañana haciendo los preparativos, salí con gusto del hotel y me dirigí a el depa de Alondra, llegué 5 minutos antes de que fueran las 4 y sin poder esperar mucho, llamé a la puerta en espera de que ella abriera. Al pasar unos minutos, Alondra abrió la puerta, primero me saludó de beso y luego la examiné de pies a cabeza; Ella tenia exactamente lo que lleva en la siguiente foto
Tremendamente sexy se veía, no dude una vez que se dio la vuelta en darle una palmada a esas grandes nalgas. Alondra mi guió por el lugar hasta el salón donde había un gran sofá, ella se sentó y me pidió que me colocara a su lado. Con gusto me senté a su lado, con mi mano derecha acariciaba su pierna con lentitud y sin dejarla actuar, me lancé a su boca directamente y nos besamos un largo rato entre manoseos por todo nuestro cuerpo.
Un largo e intenso beso nos dimos, mis manos apretaban sus pechos hermosos y sus manos, se encontraban acariciando por sobre el pantalón mi pene. Separé nuestros labios, llevé mi boca a sus pechos los cuales apretaba y lamia, desabroché la camisa que tenia y le quité el sostén, admiré por unos segundos sus pechos y continué lamiéndolos. Alondra se encontraba totalmente recostada en el sofá, vulnerable y sumisa antes mis acciones.
Me alejé un poco de ella, la vi directamente a los ojos y levantándome del sofá, me desnudé completamente. Ella sonriente, acercó su boca a mi ya erecto pene, lo miraba y sonreía, me miraba e intentaba tocarlo con su lengua hasta que finalmente lo tomó en sus manos. Lamiéndolo lentamente, cada rincón, en especial la cabeza era la que mas tiempo disfrutaba. Poco a poco su boca se tragaba mi pene, hasta empezar a chuparlo con lentitud. Esa manera de chuparlo me estaba matando, ella siempre me miraba a los ojos mientras lo hacia lo cual me volvía loco,
Su ritmo aumento a medida que el tiempo pasaba, sus labios y lengua eran maravillosos mientras hacia el trabajo. Derrepente se detuvo, mi miró a los ojos y me besó, pude sentir que su pene, ya quería ser liberado de sus ataduras. Me acaché y le quité la prenda viendo como su pene salia disparado. Sin perder tiempo llevé es trozo a mi boca, con rapidez lo chupaba y lamia, la miraba a los ojos y escuchaba sus gemidos suaves.
En un momento en que me encontraba sumergido en el acto oral, Alondra me hace detener, me levanta y nos besamos nuevamente. Del bolsillo de mi pantalón, saque dos condones, me coloqué uno y me senté en el sofá. Ella sin demora alguna se sentó en mi, mirándome a los ojos, mientras encajaba mi pene en su ano nos dimos un largo y apasionado beso que fue interrumpido por sus gemidos mientras mi pene centímetro a centímetro entraba en ella.
Con lentitud ella movía sus caderas logrando una perfecta escena de penetración, podía sentir su pene erecto en mi abdomen, mis manos acariciaban sus perfectas nalgas. Ella siempre me veía a los ojos, nos besábamos y abrazábamos. Decidí tomar el control y apretando sus nalgas, aumenté el ritmo, ambos gemíamos con fuerza y disfrutamos del momento.
Alondra en un momento se levantó, se volteó y metiendo mi pene dentro suyo de nuevo, empezó a darme unos buenos sentones. el chocar de sus nalgas en mis piernas y ver como revotaban era algo maravilloso, mis manos en su cadera empujándola hacia abajo, nuestros gemidos conectados y fuertes nos hacían entender que los dos disfrutábamos del acto.
cuando se detuvo, ella se volteó, me miró y se colocó un condón, se arrodilló y abriendo mis piernas, empezó a comerme el ano con lentitud, sus dedos entraban en mi hasta que al fin, lentamente metía su pene en mi mientras yo gemía con gusto. una vez dentro, sus embestidas eran rápidas, haciendo chocar nuestros cuerpos. Nuestros gemidos sincronizados y el gran placer que sentíamos era impresionante.
Alondra me lanzaba esos, sus manos acariciaban mi pene lentamente, ver sus espectacular cuerpo frente a mi, mientras me penetraba, gimiendo y gozando de placer, me hacia sentir como un rey. Noté que Ella empezaba a embestirme mas fuerte, lo podía notar en su cara, la eyaculacion ya venia; la detuve, me arrodillé frente a ella y le quité el condón, inmediatamente metí su pene en mi boca y lo chupé hasta obtener la leche, la miraba a los ojos mientras salia de su cuerpo ese liquido hasta ya no tener más.
Cuando terminó de correrse, me levanté y la besé compartiendo su semen el cual empezaba a escurrir por su cuerpo. Aun no era hora de terminar, hice que Alondra se colocara en cuatro y la penetré nuevamente, apretando sus nalgas y palme andolas llevaba un ritmo constante, los dos gemíamos con fuerza hasta que llegué al climax, eyaculé en sus grandes nalgas derramando todo por el sofá.
Al terminar ambos cansados, en el sofá nos quedamos un rato. Sin darme cuenta, ya estaba erecto nuevamente, Alondra mi miró y sonrió, acto seguido, con su mano derecha empezó a masturbarme mientras nos besábamos. Fue un largo tiempo así hasta que me corrí nuevamente, esta vez en la boca de ella.
Cuando todo se calmó, me bañé, me vestí y luego de despedirnos de una beso, salí al hotel.
Les dejo el anterior para que lo disfruten.
Paula: http://www.poringa.net/posts/relatos/3485185/Paula-Shemale.html
Como segundo destino de vacaciones estoy en Bogotá, llegué el Domingo en la mañana ya que conduje de noche luego del encuentro el Sábado, el lunes lo tomé para conocer un poco la ciudad durante todo el día, en la noche, ya en el cuarto del hotel, entré a Mileroticos y encontré a esta divinidad. Alondra.
Como pueden notar, es un verdadera hembra, Tetona, culona, hermosa y buena verga, Sin perder mucho tiempo contacté con ella, quedó la cita para el martes a las 4 de la tarde. En este momento son las 11 pm del martes 15 y aún mi cuerpo está ardiendo por este gran encuentro.
Al llegar casi la hora prometida, luego de toda la mañana haciendo los preparativos, salí con gusto del hotel y me dirigí a el depa de Alondra, llegué 5 minutos antes de que fueran las 4 y sin poder esperar mucho, llamé a la puerta en espera de que ella abriera. Al pasar unos minutos, Alondra abrió la puerta, primero me saludó de beso y luego la examiné de pies a cabeza; Ella tenia exactamente lo que lleva en la siguiente foto
Tremendamente sexy se veía, no dude una vez que se dio la vuelta en darle una palmada a esas grandes nalgas. Alondra mi guió por el lugar hasta el salón donde había un gran sofá, ella se sentó y me pidió que me colocara a su lado. Con gusto me senté a su lado, con mi mano derecha acariciaba su pierna con lentitud y sin dejarla actuar, me lancé a su boca directamente y nos besamos un largo rato entre manoseos por todo nuestro cuerpo.
Un largo e intenso beso nos dimos, mis manos apretaban sus pechos hermosos y sus manos, se encontraban acariciando por sobre el pantalón mi pene. Separé nuestros labios, llevé mi boca a sus pechos los cuales apretaba y lamia, desabroché la camisa que tenia y le quité el sostén, admiré por unos segundos sus pechos y continué lamiéndolos. Alondra se encontraba totalmente recostada en el sofá, vulnerable y sumisa antes mis acciones.
Me alejé un poco de ella, la vi directamente a los ojos y levantándome del sofá, me desnudé completamente. Ella sonriente, acercó su boca a mi ya erecto pene, lo miraba y sonreía, me miraba e intentaba tocarlo con su lengua hasta que finalmente lo tomó en sus manos. Lamiéndolo lentamente, cada rincón, en especial la cabeza era la que mas tiempo disfrutaba. Poco a poco su boca se tragaba mi pene, hasta empezar a chuparlo con lentitud. Esa manera de chuparlo me estaba matando, ella siempre me miraba a los ojos mientras lo hacia lo cual me volvía loco,
Su ritmo aumento a medida que el tiempo pasaba, sus labios y lengua eran maravillosos mientras hacia el trabajo. Derrepente se detuvo, mi miró a los ojos y me besó, pude sentir que su pene, ya quería ser liberado de sus ataduras. Me acaché y le quité la prenda viendo como su pene salia disparado. Sin perder tiempo llevé es trozo a mi boca, con rapidez lo chupaba y lamia, la miraba a los ojos y escuchaba sus gemidos suaves.
En un momento en que me encontraba sumergido en el acto oral, Alondra me hace detener, me levanta y nos besamos nuevamente. Del bolsillo de mi pantalón, saque dos condones, me coloqué uno y me senté en el sofá. Ella sin demora alguna se sentó en mi, mirándome a los ojos, mientras encajaba mi pene en su ano nos dimos un largo y apasionado beso que fue interrumpido por sus gemidos mientras mi pene centímetro a centímetro entraba en ella.
Con lentitud ella movía sus caderas logrando una perfecta escena de penetración, podía sentir su pene erecto en mi abdomen, mis manos acariciaban sus perfectas nalgas. Ella siempre me veía a los ojos, nos besábamos y abrazábamos. Decidí tomar el control y apretando sus nalgas, aumenté el ritmo, ambos gemíamos con fuerza y disfrutamos del momento.
Alondra en un momento se levantó, se volteó y metiendo mi pene dentro suyo de nuevo, empezó a darme unos buenos sentones. el chocar de sus nalgas en mis piernas y ver como revotaban era algo maravilloso, mis manos en su cadera empujándola hacia abajo, nuestros gemidos conectados y fuertes nos hacían entender que los dos disfrutábamos del acto.
cuando se detuvo, ella se volteó, me miró y se colocó un condón, se arrodilló y abriendo mis piernas, empezó a comerme el ano con lentitud, sus dedos entraban en mi hasta que al fin, lentamente metía su pene en mi mientras yo gemía con gusto. una vez dentro, sus embestidas eran rápidas, haciendo chocar nuestros cuerpos. Nuestros gemidos sincronizados y el gran placer que sentíamos era impresionante.
Alondra me lanzaba esos, sus manos acariciaban mi pene lentamente, ver sus espectacular cuerpo frente a mi, mientras me penetraba, gimiendo y gozando de placer, me hacia sentir como un rey. Noté que Ella empezaba a embestirme mas fuerte, lo podía notar en su cara, la eyaculacion ya venia; la detuve, me arrodillé frente a ella y le quité el condón, inmediatamente metí su pene en mi boca y lo chupé hasta obtener la leche, la miraba a los ojos mientras salia de su cuerpo ese liquido hasta ya no tener más.
Cuando terminó de correrse, me levanté y la besé compartiendo su semen el cual empezaba a escurrir por su cuerpo. Aun no era hora de terminar, hice que Alondra se colocara en cuatro y la penetré nuevamente, apretando sus nalgas y palme andolas llevaba un ritmo constante, los dos gemíamos con fuerza hasta que llegué al climax, eyaculé en sus grandes nalgas derramando todo por el sofá.
Al terminar ambos cansados, en el sofá nos quedamos un rato. Sin darme cuenta, ya estaba erecto nuevamente, Alondra mi miró y sonrió, acto seguido, con su mano derecha empezó a masturbarme mientras nos besábamos. Fue un largo tiempo así hasta que me corrí nuevamente, esta vez en la boca de ella.
Cuando todo se calmó, me bañé, me vestí y luego de despedirnos de una beso, salí al hotel.
4 comentarios - Vacaciones: Alondra (Shemale)