Twittear |
Si ya es un placer elaborarlas y disfrutar su aroma, su sabor es delicado y apetecible. Cálidas y cremosas, como todos los dulces que llevan almendras, me encantan!!!
Aquí tenéis la receta. Entremos en la cocina a divertirnos. Música, una copita de buen vino y la magia de mezclar cuatro ingredientes para obtener unas deliciosas galletas como éstas. Pienso que vale la pena.
INGREDIENTES:
200 g. de almendras molidas, 100 g. de azúcar glas, 150 g. de harina para repostería, 100 g. de mantequilla, 1 huevo Xl y 60 g. de almendra picada.
ELABORACIÓN:
1- Tamizamos la harina y la ponemos en un recipiente hondo.
2- Añadimos la almendra molida y la mantequilla cortada a daditos pequeños.
3- Mezclamos hasta conseguir una masa arenosa similar al pan rallado.
4- Agregamos el azúcar glas y mezclamos bien.
5- Añadimos el huevo y la mitad de la almendra picada y mezclamos hasta que se integren. La masa debe despegarse de las paredes del recipiente con facilidad.
6- Tapamos la bola de masa con film y dejamos que repose en frío durante media hora.
7- Transcurrido este tiempo, colocamos la masa entre dos pliegos de papel vegetal y la estiramos con un rodillo dejándola de un grosor aprox. a 3 milímetros.
8- Damos forma a las galletas con un cortador redondo y las vamos colocando sobre una placa de horno con papel vegetal.
9- Espolvoreamos la superficie con un poco de almendra picada, presionando ligeramente con los dedos para fijarla.
10- Metemos al horno precalentado a 180 grados hasta que comiencen a tomar color por los bordes.
11- Pasamos a una rejilla metálica hasta que se enfríen por completo y luego las conservamos en un recipiente hermético hasta su consumo.