ejemplar de atún que pasó a 7 millas de la almadrabeta, el que más cerca ha estado de caer.
Nace como alternativa al monopolio de las almadrabas. Cuatro jovenes zahareños, bueno alguno no tan joven, han inventado un nuevo arte de pesca que supone una alternativa a las milenarias almadrabas, se trata de una cuerda a cuya punta se le ata un Quechua; si cae un atún pues cayó, lo han bautizado como la almadrabeta. Aseguran que la inversión es tan solo de unos diez euros, y que el mantenimiento es a coste cero. Habló para Noticiario Global uno de los promotores de la almadrabeta:" no tenemos prisa, con que caiga un atún al año ya sería muy rentable, nosotros somos gente muy positiva y optimista, el no ya le tenemos, a partir de ahí.."