montaña rusa emocional

Se retuerce
mi montaña rusa emocional,

me deshago
como espuma
de mar

en un aire
que desconozco

pronto no quedará nada de mi,

mis esfuerzos por resistir
los vientos de la vida

se desmoronan,

solo soy un conjunto
de ruínas y escombros,

donde ha vuelto la ceguera
a mi alma
envuelta otra
vez en nieblas y oscuridad,

me siento al lado
de un profundo Precipicio

y miro hacia la Muerte
como mi mayor salvación,

luego me arrepiento
y sigo a cuestas con mi dolor,


creo que pronto
no podré escribir

siento que me llama la Muerte
o tal vez ya estoy muerta

hasta esperar que me entierren.


Y no sé como deshechar estos
pensamientos,

me veo alejándome aún
más del mundo,

después de todo lo único
que tengo es dolor,

ensordecedor
que me empuja a desear la muerte
en estos momentos
tan bajos de ánimos.

Posiblemente
si no logro remontar mi ánimo
y centrar mi espíritu

tendré que cerrar mis blogs,
comprendo que no resulte
muy enriquecedor leer esto,

y no aporta nada a nadie
excepto desahogar mi espíritu

y expresar cómo me siento,
tampoco voy a mentir

diciendo que estoy estupendamente
cuando me siento realmente mal.

Me gustaría salir de este bache,
pero ahora mismo las fuerzas me fallan
y el ánimo no me acompaña ,

y no sé como despedirme,
si me recupero me gustaría volver.

Repliego alas,
en mi introversión
puede que encuentre mi fin

o quizás alguna salida
con muchísima suerte.

Ahora mismo me encuentro
agotada para nada más.

Gracias por acompañarme
tanto tiempo.

Me siento agradecida.

Besos.

abandono

Podría dejar
desangrar todas mis heridas

en vez de taponarlas,
taparlas

o tratarlas inútilmente.



Podría dejar pasar
el tiempo observando

la realidad
de lo poco que le importo.


Podría intentar nacer
de nuevo

y volver a tener ilusiones.


Podría perder todos
mis colores

Y por fin
dejar de sonreír

a la vida,
y olvidar que le amé.

distintas distancias

Distintas distancias

entre personas

se abren paso a distintas



velocidades.



Fin.

preludio

Creo que ya no necesito del viento
para hablar conmigo misma
ni con nadie más,
me sobra alma
por desgracia.