Me estoy poniendo ya en marcha con mis regalos para el intercambio convocado por Revesderecho. Ayer, aprovechando que hacía un poco menos de calor, saqué una lana morada que tenia en el armario. La he ovillado yo sola haciendo unas cuantas peripecias (no he hecho fotos porque ya no me quedaba con qué hacerlas, je, je) y he empezado a tejer para ver qué salía. También saqué unas cuentas y me “estudié” un libro que compré hace poco, pero para estas cosas estoy muy torpe, y al final todo va al suelo, por debajo de los sofás, etc. Ya se irán viendo los resultados.

Además tengo que salir a comprar unas cosillas, porque es inminente el cierre por vacaciones de algunas tiendas. Así que también estoy “estudiando” como estirar al máximo esos 10 dolarcillos que voy a traducir a euros para que cundan más, teniendo en cuenta el peso de lo que compre, que luego llegan los del correo y te pegan el sablazo por un “sobrecito” de dos kilos de ná.
Cuando empiezan a arderme los dedos por manipular la lana, y me canso de recoger cuentas, me paso al suéter que os he enseñado en estos últimos post. Ya me queda menos.
