Sevilla tiene un color especial.
Y Valencia y Colombia también.
Curiosa combinación.
Y a vivir del cuento!!!
El caso fue y fue un caso,
que entre estrella y estrella,
debajo dormía ella.
Y entre velo y desvelo,
parece ser,
que una extraña esencia,
y nada de presencia,
la visitó esa misma noche,
una madrugada de domingo,
en mi misma casa,
para contarme algo.
Creer o no creer,
esa es la cuestión.
Locura o no lo.cura.
Puede ser...
El caso es que,
después de tres días de bloqueo,
he decidido no tener miedo,
y pensar que si de verdad
tengo un guía espiritual,
o lo que es lo mismo,
y sin ánimo de ofender,
un fantasma a mi lado,
le pido que ya que está,
que me ayude a cocinar,
trabajar, u otras labores domésticas,
que estoy dispuesta a compartir.
Dicen las malas lenguas,
y las buenas también,
que hay almas,
que buscan a gente de la tierra,
abiertas y sensibles,
para contarles algo.
Y digo yo,
tal vez, quizás, quizás...
abierta y sensible,
que sea lo que sea,
por favor,
las palabras claras y el chocolate espeso.
Que quién tenga algo que decirme,
que me busque,
que me encuentra,
caralibro,
o cara a cara.
Pudiera ser.
Pero que no ande despertando
Atentamente.
Nadia Del Arte.
-De esencias, guías y otras historias-
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