Mostrando entradas con la etiqueta pasta. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta pasta. Mostrar todas las entradas

12/1/11

Se habla de nosolopastaypizza....

¡En el blog de la Sociedad Dante Alighieri de Zaragoza!
Me emociona saber que alguien ha decidido escribir algo sobre mi blog...
Así que devuelvo la pelota haciendo algo de publicidad a este nuevísimo e interesantísimo blog de cultura italiana, en el que a veces colaboro con aportaciones principalmente gastronómicas ¡cómo no!
En el blog de la Dante encontraréis muchos artículos relacionados con Italia, sus ciudades, su cultura, su lengua, sus habitantes y su gastronomía. Vale la pena echarle un vistazo de vez en cuando, siempre hay algo curioso e interesante para leer, como por ejemplo la sección de "falsos amigos" italiano-español, de Pedro, que ya está en su 10ª entrega o las maravillosas "pieles" de ciudades italianas, de Pietro.
En fin, que merece una visita.
Y pronto prometo volver con nuevas recetas, que hace mucho que no cuelgo nada... ¡demasiado!

20/4/10

Lasaña de carne y tomates secos

La lasaña es un plato muy típico en Italia, pero es de esos platos que no se comen todos los días y que los italianos asociamos a un día de fiesta.
La lasaña tradicional es la que se hace con carne picada, salsa de tomate, bechamel y láminas de pasta al huevo. Sin embargo, existen mil maneras de preparar la lasaña, con o sin carne, con más o menos ingredientes, más o menos calórica.
Ésta es una receta bastante fácil, que no requiere mucha preparación y que es bastante resultona y original.
Los ingredientes:
- tomates secos en aceite
-cebolla
-carne picada (de cerdo, vacuno o ambos)
- láminas de pasta para lasaña
-sal y pimienta
-parmesano rallado
Para la bechamel:
-leche
-harina
-mantequilla o margarina
-sal
Cómo se prepara:
Ante todo se prepara el relleno: se sofríe la cebolla en aceite de oliva, cortada en trocitos muy pequeños y cuando está empezando a dorarse se le añaden los tomates secos, también cortados en trozos pequeños.
Se rehoga durante 5 minutos y se le añade la carne picada (yo suelo usar una mezcla de cerdo y ternera). Dejando el fuego bastante alto, dejamos que se dore bien la carne por fuera, salpimentamos y cubrimos la sartén, bajando el fuego al mínimo.
Mientras tanto en una olla ponemos abundante agua a hervir, con una pizca de sal.
Cuando empieza a hervir, se van echando las láminas de pasta, de una en una para que no se peguen y las dejamos un par de minutos.
Ésta es la parte más larga y aburrida. Para evitar hacerlo, es mejor comprar pasta de la que no es necesario hervir (en Italia es muy fácil de encontrar).
Si la hervimos nosotros, una vez sacada del agua, hay que dejarla reposar bien extendida encima de un paño húmedo.
Cuando todas las láminas estén listas, se puede empezar a rellenarlas.
Antes de hacerlo, echamos un buen puñado de parmesano rallado en el relleno y lo mezclamos bien.
Entonces, ponemos un poco de relleno en una extremidad de la lámina de pasta y la enrollamos, tipo canelón.
Para luego presentarla, hay dos formas: o bien dejamos el canelón entero, tal cual, y lo apoyamos junto con otros en una bandeja de horno, o bien lo cortamos en tres y colocamos las partes de manera que se parezcan a unas flores, también en una bandeja de horno.

Seguimos con esta operación hasta terminar toda la pasta y todo el relleno.
Después, preparamos la bechamel. Yo suelo dejarla bastante líquida, para que empape bien la pasta.
Para prepararla, se derrite un poco de mantequilla en un cazo, se añade harina y despacio se le añade la leche, ya caliente (eso ayuda a que no se formen grumos), mezclando con una batidora manual, hasta que se espese un poco. Se añade una pizca de sal y si os gusta también un poco de nuez moscada.
En cuanto esté lista, se echa por encima de la lasaña, se añade un poco de queso rallado si se quiere, y al horno.
No hace falta que se quede mucho rato, con media horita a 150 º es suficiente. Y ya está, un plato muy rico y que ¡seguro que os sorprenderá!

16/4/10

Pasta con brócoli

¿Quién ha dicho que comer pasta todos los días es aburrido? A mí la verdad es que me parece que en Italia uno podría pasar un año entero comiendo pasta tooooodos los días y sin repetir receta ni una sola vez.
Aquí tenéis un ejemplo: una de las recetas más fáciles y más rápidas para cocinar una pasta sabrosa, sana y ligera y ¡que suele tener muchísimo éxito!
Los ingredientes:
-pasta (mejor si corta: penne, maccheroni, fusilli... lo que más os apetezca)
-brócoli
-agua
-sal gorda
-parmesano rallado
-aceite de oliva
Cómo se prepara:
Ante todo se pone a hervir en una olla abundante agua.
Mientras se calienta, se lava y se corta en ramas pequeñas el brócoli.
Cuando el agua empieza a hervir se le echa un puñadito de sal gorda y acto seguido se añaden la pasta y el brócoli. Las cantidades dependen un poco del hambre que tenga uno (yo suelo hacerlo como plato único, así que suelo echar unos 80 gr de pasta por persona) y de si os gusta con más o menos brócoli.
Se deja hervir el tiempo que requiera la pasta (suelen ser entre 10 y 12 minutos, y en todo caso, si la pasta es italiana, lo pone en el paquete), sin dejar de remover cada dos minutos con una cuchara.
Cuando haya pasado el tiempo de cocción, se escurre todo en un escurridor, se vuelve a echar ENSEGUIDA (nada de dejarla escurrir durante horas...) en la olla y se añade aceite crudo. Se mezcla bien y se sirve.
En la mesa, habrá queso rallado, para quien quiera añadirlo en su propio plato.
A mí me gusta a veces echarle una pizca de guindilla picante molida o incluso gengibre en polvo (o los dos a la vez).
¿Se os ocurre un plato más rápido y rico?
¡Buon appetito!

16/3/10

Lasaña con espinacas, carne y setas

Este plato es muy consistente y muy rico.
Se prepara relativamente rápido, si se tienen todos los ingredientes a mano.
Un consejo: mejor usar pasta italiana para la lasaña. No es por nada, pero suele estar mejor que las otras, independientemente de la nacionalidad... bueno, está claro que lo dice una italiana, así que soy poco imparcial, pero ¡provadlo y me diréis si no tengo razón!
Los ingredientes:
- pasta para lasaña
- espinacas frescas
- carne picada (de vacuno o mezcla vacuno/cerdo)
- setas de cardo
- leche
- harina
- mantequilla
- sal
- pimienta
Cómo se prepara:
Se cortan las espinacas con un cuchillo bien afilado o con una "mezza luna", un cuchillo especial con forma de media luna muy utilizado en Italia.
Se ponen las espinacas en una sartén con un hilo de aceite y un diente de ajo y se rehogan durante 8-10 minutos.
Por otro lado, se pica una cebolla y se rehoga en una sartén con un hilo de aceite.
Mientras tanto se cortan las setas de cardo en tacos medianos y cuando la cebolla esté doradita se añaden a la sartén, dejando el fuego bastante alto, para que se frían y se doren.
Cuando las setas están doradas y medio hechas, se añade la carne y se sofríe también, añadiéndole una pizca de sal y de pimienta.
Aparte se prepara la bechamel. Yo suelo dejarla bastante líquida, para que empape bien la pasta.
Se derrite un poco de mantequilla en un cazo, se añade harina y despacio se le añade la leche, ya caliente (eso ayuda a que no se formen grumos), mezclando con una batidora manual, hasta que se espese un poco. Se añade una pizca de sal y si os gusta también un poco de nuez moscada.
En una bandeja de horno se pone una capa de bechamel, una de pasta (cruda, no hace falta cocinarla si la bechamel es suficientemente líquida), una de carne con setas.
Luego se repite la operación, pero esta vez con espinacas.
Se espolvorea todo con parmesano rallado y al horno, a 150º durante media hora.
Se sirve bien caliente.

15/10/09

Pasta con calabaza, gambas y curry

A ver, en el título dice NO SOLO pasta y pizza ¡no dice que no vaya a proponeros ninguna receta de pasta o pizza! Pues sí, antes o después tenía que caer alguna, así que ahí va la primera de pasta, otro invento para paladares algo especiales y poco tradicionales....
Los ingredientes:
-calabaza
-cebolla
-ajo
-gambas peladas (frescas o congeladas)
-curry amarillo en polvo
-vino blanco
-leche
-aceite de oliva
-mantequilla
-sal
-pimienta
-salvia
Cómo se prepara
Se sofríen la cebolla picada fina y el ajo entero en un hilo de aceite. Cuando estén dorados se añade un trocito de mantequilla (sin pasarse)
y cuando esté deshecho se añaden las gambas (las cantidades como siempre en mis recetas "a ojo" y según los gustos...).
Yo en este caso he usado gambas congeladas, que eran las que tenía en casa, aunque seguro que saldría mejor con gambas frescas.
Mientras preparamos el sofrito, vamos poniendo el agua para la pasta (ver abajo en "trucos útiles").
Cuando empiecen a dorarse las gambas, se añade la calabaza cortada en daditos muy pequeños y se sigue rehogando un rato, hasta que se tueste un poco por fuera, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera. Se le echa medio vasito de vino blanco, se deja evaporar la mitad y se tapa, bajando el fuego y dejándolo al mínimo.
Lavamos y cortamos unas hojas de salvia fresca y las añadimos también, cortándolas con unas tijeras de cocina en tiras finas. Añadimos también una cucharadita de curry amarillo en polvo y una pizca de sal, removemos con una cuchara y volvemos a tapar.
Si vemos que esta mezcla se queda seca, se puede añadir medio vasito de agua, pero sin pasarse, para que no se quede "aguada".
Pasados unos 10 minutos, se añade un poco de leche entera, sin llegar a tapar del todo la calabaza y las gambas, y se vuelve a tapar y a cocer durante 5 minutitos a fuego muy lento.
Mientras tanto, ya podemos ir echando la pasta.
Yo creo que para esta salsa lo ideal es una pasta corta (penne, farfalle o algo por el estilo), pero aún mejor si es pasta con huevo, como la que usé yo (que fuera de Italia es un poco difícil de encontrar... ¡un motivo más para visitar mi país!).
Una vez que la pasta está en su punto, se escurre y ACTO SEGUIDO (luego entenderéis el por qué de este comentario...) se echa en la misma sartén de la salsa. Se mezcla bien, se espolvorea con una pizca de pimienta y ¡lista para servir!
¡Buon appetito!
Trucos útiles (o "de como no convertir la pasta en una masa de cemento armado..."):
  • Usar una olla grande y con mucha agua: no hay que quedarse cortos con el agua, si es demasiada no pasa nada, pero si es demasiado poca, la pasta se apelmaza y no se acaba de cocer bien.
  • Usar sal gorda. Con la sal tampoco hay que quedarse cortos, pero sí que sería peor pasarse, porque entonces no hay vuelta atrás ;) Las medidas se cogen con la experiencia, pero yo en general para dos personas uso un litro y medio o incluso dos litros de agua y un puñado de sal.
  • En cuanto se echa la pasta, remover enseguida con una cuchara de madera. Nada de añadir aceite o cosas raras para que la pasta no se pegue. Si la pasta es de buena calidad y si se remueve de vez en cuando ¡NO SE PEGA!
  • Si la pasta es italiana, seguir las instrucciones del paquete para saber cuánto tiempo dejarla en el agua hirviendo. Normalmente no fallan.
  • En cuanto termine el tiempo de cocción, escurrir la pasta y ENSEGUIDA condimentarla con la salsa. A los italianos nos horroriza saber que hay gente que escurre la pasta y la deja más de medio segundo en el escurridor, para nosotros es como un sacrilegio. Es más, es muy típico aquello de llamar a casa cuando se sale de trabajar y decir "echa la pasta, que ya he salido". Es decir, la pasta está para hacerla y comerla enseguida, no para dejarla ahí esperando horas. Así es cuando se estropea y se convierte en una masa incomible... Bueno, por lo menos para los italianos de pro :)

23/9/09

Bienvenidos

Bienvenidos a mi blog. Como veis, mi intención es demostraros que la cocina italiana no está hecha solo de pasta y pizza, pizza y pasta, como muchos suelen pensar, sino que comemos muchas más cosas, deliciosas y variadas.
Una comida típica en Italia está compuesta normalmente por tres platos:
-un primer plato (que puede ser pasta, arroz o sopa)

-un segundo plato (carne o pescado, acompañado con una guarnición de verduras o ensalada)
-postre
Espero que mis recetas os gusten y se os haga la boca agua con ellas. Algunas son mías, otras regaladas por mis amigas y otras recogidas por ahí y hechas a mi gusto...

Bueno pues.... ¡a comer!


BUON APPETITO!