La lana embrujada probé a tejerla a dos agujas y queda mucho mejor que en crochet, seguramente era eso lo que quería decirme haciéndome equivocar y destejer a cada rato.
Ví que están de moda los sacos empezados por adelante (por donde van los botones) en vez de empezarlos de abajo o de arriba, las carreras quedan como paradas, muy práctico porque no llevan costuras a los costados. En una revista ví uno y estuve leyendo el patrón, me dí cuenta que esa misma manera se podría tejer un chal (sí, sí, se me metieron los chales en la cabeza y no hay quien los saque de ahí).
Es simple, se pone una cantidad de puntos, depende del ancho que se quiera hacer el chal. Se ponen por ejemplo 10 puntos, un marcador de puntos, 20 o 25 puntos más, otro marcador y el resto de los puntos hasta que tenga el ancho que se quiera.
Después se tejen todos los puntos, la carrera siguiente se teje hasta el primer marcador que se puso, es decir se dejan 10 puntos sin tejer. La carrera siguiente se teje hasta el segundo marcador, es decir se dejan 30 o 35 puntos sin tejer, y a la carrera siguiente nuevamente se tejen todos los puntos, y así se sigue hasta que el chal tenga el largo que se quiera, o sea hasta que una se pueda envolver en él. Si se quiere hacer el chal o capita más ancho se le puede agregar otro marcador más.
Bueno, y para descansar de las agujas de tejer y las lanas, empecé otro proyecto, aquí lo ven:
Anubis me pasó un premio que puse en mi otro blog, muchas gracias, amiga!