Mi aventura con Ottobre Design empezó cuando buscaba patrones de pañales de tela. No tardé mucho en leer buenas críticas del número 3/2005, en el cual encontré lo que yo buscaba y más. (Actualmente el patrón del pañal está gratis en su web.)
Me suscribí sin dudarlo al tener ese número en mis manos, una suscripción que empezó en España y siguió en Argentina, lugar en el que vivo ahora.
El principio no fue fácil pues como no tenía idea de nada, no sabía cuáles proyectos de costura me iban a superar… y fueron varios. Pero de a poco fui entendiendo lo que no sabía hacer, y de esa forma supe qué técnicas tenía que aprender.
Una de las primeras dificultades que recuerdo fue con un pantalón de corderoy/pana (patrón 23 Ottobre Design 3/2005) que tuve que dejar pausado porque no pasaban las capas entre el prensatelas de la máquina de coser que tenía en ese entonces.
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Después me di cuenta de que estaba haciendo mal el paso y por eso la cantidad de telas era inmanejable, pero salí de la situación con un pantalóncito nuevo (que a mi hija le quedaba grande), con la habilidad para colocar una cremallera y con una nueva máquina de coser (que dejaba pasar tantas capas de tela como yo quería, aunque no necesariamente las necesarias).
La revista Ottobre ha servido para vestir a toda mi familia, especialmente un buen uso tuvieron los ejemplares Ottobre Family. Podría hacer una entrada con todos los pantalones, camisetas/remeras, buzos/chandals, pijamas, etc... pero seguramente sería aburrido, prefiero mostrar la versatilidad de los patrones en el momento de tener que hacer algo distinto. Lo que mis hijas disfrutaron más fueron las adaptaciones de patrones para hacer una especie de ropa-disfraz.
Cuando estábamos con la etapa de las princesas le llegó el turno a Blancanieves y la base fue el patrón 31 de la Ottobre Design 3/2011.
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Con la película How to train your Dragon tuve una adaptación doble: para hacer a Chimuelo usé el patrón 24 de la Ottobre Design 4/2018 y lo modifiqué con un hack gratuito de Sew Desu Ne.
| Tiene alitas. |
| Obviamente no elegimos muy estratégicamente el fondo de la foto. |
Para hacer la camiseta de Astrid usé el patrón 19 de la Ottobre Design 4/2017, simplificado sin color blocking se hace en menos de una hora. La falda y la armadura debo reconocer que llevaron más tiempo.
Mucho más tiempo.
Extremadamente mucho más tiempo.
Por suerte, no me pregunten porqué, había una hacha de juguete dando vueltas en casa.
Con
las caricaturas de Gravity Falls le llegó el turno a la
camiseta de Mabel. Para un patrón tan simple tuve que mezclar varios: adaptando el patrón 18 de la Ottobre Design 6/2011 (en esta prenda era importante conseguir el cuello original) y agregándole las mangas del patrón 28 de la Ottobre Design 4/2012.
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Y cuando Ben 10 nos saturaba por todos lados, mi hija menor consiguió que le hiciera una camiseta con el patrón 19 de la Ottobre Design 3/2011.
Pero obviamente había que completar el conjunto con la chaqueta, para lo cual usé de base el patrón 24 de la Ottobre Design 3/2005. Recuerdo que tuve bastantes problemas por falta de tela, pero unas uniones ocultas arreglaron el problema.
Y
a veces al coser ropa para ellas me encontré con que sus muñecos
también tenían que estar a juego. Cuando hice unos chalecos
con el patrón 8 de la
Ottobre Design 3/2005, tuve que hacer una adaptación para que el osito-pulpo de mi hija menor estuviese combinado.
| Patronaje de osito-pulpo: cuadrado. |
Pero creo que nadie con hijos se pudo salvar de la etapa de Harry Potter. En mi caso me tocó hacer camisones (basados en las batas escolares) para nada menos que siete niñas, con motivo de celebrar el cumpleaños de una de mis hijas. El patrón base que modifiqué fue el 31 de la Ottobre Design 4/2018.
Las insignias de las casas las mandé sublimar en un metro de tela, algo que recomiendo para los que quieran hacer algo similar ya que por el precio de un par de insignias se imprimen muchísimas.
O sea, ya no se dónde coser más, en los delantales de cocina de mis hijas, en el mío, en el de mi esposo, en cartucheras... creo que estoy cumpliendo el rol del sombrero seleccionador con las prendas de mi casa.
Uno de los proyectos que emocionalmente significó mucho (y no fue ningún tipo de disfraz) fue realizar dos vestidos para mis hijas con el patrón 23 de la Ottobre Design 6/2011. La parte importante fue reutilizar en uno la tela de una chaqueta de una abuela, y en otro tela del pantalón del traje de bodas de mi marido.
A pesar de las dificultades de adecuar el patrón a prendas viejas el proyecto me dejó orgullosa.
| Al esposo por suerte no le tuve que coser nada. |
Ahora en esta etapa me encuentro ya usando para mis hijas los talles más pequeños de las revistas Ottobre Design Woman y no sólo los mayores de las Ottobre Design Kids.
Supongo que sería una buena idea directamente elegir ropa que me guste a mi, así pronto se las puedo pedir prestada.
PD: ¡Feliz aniversario Ottobre Design!