Cumpleaños de Gravity Falls Parte 1: Diario 3

En el 2017 (ejem...) le hicimos a Gorogoro su cumlpeaños con tema de de Gravity Falls.

Voy a ir mostrando en distintas entradas las actividades y los regalos.

Una de las primeras sorpresas para las dos fue el diario de Dipper. Conseguí el archivo de una página en inglés.

Me imprimí las páginas y busqué un tutorial para poder encuadernar a mano.

 

 

Forré con cuerina las tapas de un viejo cuaderno y con pintura dorada, marcadores negros y marrones le hice los detalles.

Los mapas y claves especiales fueron coloreados un poco para parecer viejos, luego los anexé al final del libro.

 

Tiene varios detalles más como que coloreé paginas con manchas, agregué fotos y pequeñeces que suman a la credibilidad.

Y acá un video que muestra cómo quedó

Apenas se los di fue un éxito total, la mostra mayor se lo llevó varias veces a la escuela... y una de esas veces no volvió, mi mostra despistada se lo dejó vaya a saber dónde.
Un par de meses después (luego de poner carteles por toda la escuela y preguntar a todo el mundo) apareció en una caja de cosas perdidas y volvió a las manos de mis hijas. Un misterio total es el destino del libro entre esos dos momentos, si han visto la serie sabrán que no podría haber sido mejor. Le agregó una incógnita adicional al libro.

Por supuesto ya desde el 2018 venden acá en Argentina el Diario 3 (y muchos libros más de Gravity Falls), pero éste hecho en casa fue y sigue siendo un éxito.

Por supuesto que ya se compraron todos los otros libros, no serían hijas mías sino.

Muñecos de Harry

Me di cuenta de que nunca mostré un poco más los muñecos de Harry Potter.
Pero ya he aprendido que si intento hacer una entrada larga nunca la termino, así que intentaré ser breve.

El pelo de Hermione y de Ginny lo hice con el método de coser una trencita y de ahí agarrar los distintos mechones. Seguro que tiene un nombre la técnica, la vi en un libro que tengo y en algunas páginas de internet.

Una vez que toda la cabeza esta hecha hay que emparejar un poco el largo, sino parece un león.

Y ya está, con algunos vestiditos que les robaron a las Kitty, porque mucho no les cosí al principio.

Acá se ven los cuatro principales, aunque después tuve que hacer a Draco, porque a Gorogoro le encantaba.

 Y además se sumó al grupo una muñeca que era de mi mami creo. Es más o menos del mismo tamaño así que es parte del clan. Eso sin contar a Peter y Jessie.

Por acá se ven en acción con un poco de ropita que les hice y otra robada de sus muñecos..

Hace unos meses les hice el vestido que viene con el patrón, pero me pareció aburrido, muy recto, así que lo hice con más volados (el del centro) y creo que quedó mejor.

Lo bueno es que están en uso, no todos los días, pero mejor así, van rotando.

A ver si hago la entrada del cumple de los ponys en partes, porque sino no la voy a terminar nunca.

Disfraces para el jardincito

Cuando mi mostra hermosa estaba en la salita de 4 (en el 2013) la maestra nos pidió ropa vieja para el baúl de los disfraces.

La verdad es que darles a los niños ropa vieja para disfraces es como darles una fibra gastada para dibujar. Si uno arruina desde un inicio una actividad con cosas que no funcionan o no son atrayentes los niños creerán que es siempre así, y para ellos lo que terminará siendo malo es la actividad, extrapolando la calidad de los materiales a su uso.
Y aunque es verdad que ellos se pueden disfrazar con ropa nuestra, no tiene que ser lo único, la imaginación de los niños aspira a más que ser como su papá o mamá.

No digo que me puse a hacer cosas excelentes, pero dí lo que pude de mi tiempo para que hubiese algo distinto.

Un delantalcito para niña.

Uno para niño (aunque obviamente lo puede usar cualquiera).

Y una faldita que mostré en esta entrada.

Como aproveché telas que ya tenía no puedo decir que sean las cosas más lindas del mundo (ya les mostraré los delantales de cocina que les terminé a las mostras), pero creo que vale más que una camisa vieja (cosa que pedían).

Y para darles un ejemplo de algo hecho con más tiempo les muestro un conjuntito de cocina que saqué del libro One yard wonders, fabric by fabric, el patrón es Child's chef Hat & Apron. Fue un regalito para mi sobrinita.

Está muy bien pensado que el niño solito se pueda prender el delantal sin que alguien se lo anude en la espalda.

Y el gorro de Chef tiene un diámetro de cabezota regulable con el velcro.

Este proyecto también es del 2013, supongo que a mi sobrinita no le entra, ya le tocará uno nuevo en algún momento.

Más princesas y capucha del libro de Oliver+S

Cuando hice la entrada de Blancanieves, les comenté que la abuelita también había hecho un vestido de Bella.
Ayer se lo traté de poner y ya no le entra, cosa que me indica que es hora de mostrárselos.

En esta foto del año pasado se puede ver a las enanas disfrazadas. El de Blancanieves ya casi les llega a las rodillas a las dos y el de Bella necesita además urgente agregarle tela atrás para poder cerrarse.

Mi mami le hizo el vestido justo cuando estaban con la peli de Bella, así que fue bien recibido. No hay que subestimar nunca el hacer las cosas a tiempo.

Además buscando fotos con el vestido encontré ésto. Un gorrito que le mandé a mi amiga Carine para mi sobrinita en Suiza.

El patrón es Cosy Winter Hood, del libro Little things to sew, de Oliver+S.

La tela es un corderoy/pana rosado que usé anteriormente en este pantalón y en este vestido. Ya creo que no me queda casi nada, a lo sumo para una cartuchera linda. El interior es una felpita rosada muy suave que encontré entre mis telas.

Para variar le quedó gigante el gorrito, pero bueno, como se los mando una estación desfasada y sin poder medir a mi destinataria prefiero estimar de más... unos dos años de más.

Vestiditos para Navidad

Y fue la navidad del 2014, así que vamos un poco actualizados.
Para que la madrina de la mostra vea lo grande que está.

Hace mucho me compré en una Feria Creativa de Barcelona, unos libros en francés y japonés, uno de ellos era la versión parisina de éste. Casi 5 años más tarde lo usé, no porque no fuera lindo (realmente tiene patrones simples y fáciles, además de bien diseñados) sino porque a veces pienso que tengo demasiados libros.
Luego me doy cuenta del error de fondo de esa oración y me voy a la biblioteca a buscar unos nuevos. Lástima que no hay de los más modernos.

En fin, del libro que comenté tomé el modelo b (vestido con cuello cuadrado) como base, después lo adapté a las telas que tenía, así que en los dos ejemplos se ve un poco diferente.

El suelo de nuestra terraza sufre constantemente ataques monstriles artísticos.

Siempre trato de reciclar ropa antes de usar telas nuevas.
Y cayó esta falda que me quedaba gigante (aunque antes no), con un borde muy lindo abajo y forro. Nunca me acuerdo de sacar fotos del "antes" cuando hago estas cosas, pero como me quedaron algunos restos los muestro.

Se ve que el ruedo del forro no quedó muy alineado, pero puesto se disimula jejeje. Es que era la parte del cierre y tenía menos tela a lo alto. Los botones vienen de un paquetito que me regaló mi amiga Carine.

 Por adentro aproveché el forro original de la falda.

Y Gorogoro posa de formas muy raras el modelito.

Parece una escena de kungfu.

El vestido de la mayor también lo hice reciclando, en este caso una falda y una camisa bordada hace millones de años por mi abuela.

Antes de cortar planché un poco, tampoco soy taaaan desastre.

La abuela que realmente tenía muy buena mano para hacer cosas.

 Como la camisa era color marfil y la falda blanca traté de usar partes de la camisa para hacer los bies de las sisas, así se veía un poco más conjuntado (supongamos que esa palabra existe).

En el canesú traté de usar la tira bordada, tanto atrás como adelante.

hermosa

 Los botones son parte de la caja que mi mamá heredó de mi abuela y que yo le robé a mi mamá.

Y ahora un poco más de modelaje.

No tengo fotos en las que salgan quietas. Supongo que ya conocen la situación.

El talle es el mismo para las dos, para que se puedan prestar los vestidos. Total, la chiquita creo que terminará siendo la más alta de la casa en unos añitos.

No, no lo bloqueé

Empecé este chal/manta hace casi tres años, apenas llegamos a Mendoza.

Compré una lana de oferta en una tienda (de la cual todavía me quedan tres madejas) tan sólo porque me parecía linda y barata. Supe qué hacer con ella cuando encontré en una de las cajas de la mudanza mi libro Knitting 24/7.

El patrón es Travel Shawl. Me gustó mucho tejerlo, me pareció muy bien explicado y simple. Creo que estuvo en mis agujas casi dos años, colgado en una bolsita que tenía cerca de dónde jugaban las gordas. Ya no sé si ésto o el pullóver verde de mi cocinerito ha sido lo que más me ha llevado hacer, pero son cosas que he disfrutado, aunque a veces tuviera que destejer.

Apenas lo terminé (en invierno, hace unos meses) se quedó en la silla del desayunador, para tapar las patitas de los que nos sentamos ahí, esperando algún momento libre para bloquearlo como corresponde.
Pero como nunca me hago el tiempo lo muestro tal cual está, en alguna otra entrada lo mostraré más estiradito.

Dr Seuss

Ya les comenté que en casa tenemos algunos autores preferidos, uno de ellos es Dr. Seuss. Si quieren saber más de su vida les dejo este enlace (también les dejo la página en inglés del autor). Un detalle para nombrar es que ganó una mención especial del premio Pulitzer por el conjunto de su obra de libros infantiles.

Hay muchas manualidades que hemos hecho a partir de sus libros, ya que es bastante claro que en Argentina no se encuentra nada comercialmente ya hecho, así que es una excusa perfecta para hacer o pedir (ya entenderán esto último jejej)

El libro "Prosciutto e uova verdi" (Jamón y huevos verdes) es una maravilla, además en casa teníamos fieltro/paño lenci verde sobrante del sombrero de Peter Pan. O sea que no había excusas.

Patitas de Gorogoro esperando que le devuelva sus juguetes...

Y el otro libro que nos encanta (especialmente a mami pro-ecología) es "Lorax" (El Lorax), que quizás suena más porque hicieron una película del libro (como también con The cat in the Hat, How the Grinch Stole Christmas, Horton hears a who!, además hay muchísimas animaciones).
Pero como la experta en amigurumis es mi no-tan-santa-madre, recurrí a ella con el pedido y, después de un tiempo, apareció nuestro amigo bigotudo como regalo de cumpleaños.

El Lorax duró en mis manos el tiempo que la Mostra tardó en saltar de su silla para sacármelo de las manos.
Lleva durmiendo con ella varias noches.
:)

Crictor

Algunos autores son ya nombres familiares para las mostras: Claude Ponti, Nicoletta Costa, Gabriela Keselman, Dr. Seuss, Maurice Sendak, Tomi Ungerer...

Éste último autor nos ha regalado bellezas como Los Tres Bandidos y (la más recientemente adquirida) Crictor.

En este enlace pueden ver una descripción del libro.

Lo que pasó en nuestra casa fue que de una noche a la otra vinieron dos Crictors (iguales y dos, muy importante lo de DOS, uno para cada una... ¿dije que hice dos?) a jugar y a quedarse a vivir con nosotros.
Son de un resistente corderoy/pana apto para ser lavado una y otra vez, un buen detalle si viven aventuras con sus amigas, mis hijas mostras.

Y los he visto ser usados para atar una hermana de la pierna (importante detalle) y arrastrarla por la casa, para engancharlos en la colitas/coletas y hacer de cuenta que son el pelo de Rapunzel, como cuerda de rodeo para apresar al Efelante de Winnie the Pooh, como cinturón para sostener una falda...

Pero una frase que nunca pensé que iba a decir salió de mi boca varias veces desde que estas serpientes buenas viven con nosotros:
"¡No le pegués a tu hermana con Crictor!"


Mañana fotos de los grisines y nueva receta del CCN