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domingo, 13 de septiembre de 2009

Ojos bien cerrados

Cada vez que llega la fecha en que una de mis bebas cumple años, no puedo evitar remontarme (casi podría jurar que en cuerpo y alma) a ese día en el que las tuve por primera vez entre mis brazos.
Hace 19 años me convertí en mamá por primera vez. Fue un día de muchas emociones pues era un embarazo de alto riesgo. Había quedado embarazada justo un año después de la quimioterapia y podía haber riesgo de que efectos residuales en la sangre afectaran de alguna forma a mi beba, pero solo lo sabríamos hasta después del parto.
Los nervios me daban mucha batalla y la ansiedad me estaba matando.
Hubo algunas complicaciones en la operación pues perdí mucha sangre por problemas derivados de la quimioterapia (que no les puedo explicar porque creo que ni yo misma entendí).
Lo cierto es que cuando me entregaron a mi bebé, ya en la habitación, todos los dolores, miedos, ideas malas y similares desaparecieron para dejar que mi humanidad se llenara de hermosos sentimientos y de una emoción que se me escapaba en forma de lágrimas y sonrisas.
Como toda madre, destapé aquel “tamalito” para contarle los deditos de pies y manos y cerciorarme de que todo estuviera en su lugar.
A pesar de que esta operación era algo incómoda para la personita recién llegada, nada hacía que abriera sus ojitos. Llegó con los ojos bien cerrados y todo el tiempo que estuvo conmigo los mantuvo así. Y así pasaron dos días sin que yo pudiera vérselos. Entonces, el miedo empezó a apoderarse nuevamente de mí.
Cuando llegó el pediatra le hice saber mi preocupación por que mi bebé no abría los ojos.
Él trató de calmarme y me dijo que en cualquier momento los abriría. Yo le dije que no importaba si la despertaba pero que POR FAVOR hiciera que los abriera.
Entonces, la tomó en sus brazos y me dijo: “A esto se le conoce como el efecto de la muñeca”, mientras hacía a mi nena hacia abajo y luego hacia arriba. Pero cuando se suponía que debían abrirse los ojitos, más cerrados parecían.
Casi rompí en llanto. Pensé que mi nena no tenía ojos.
El doctor debe haberse reído de mí por dentro, pero mi miedo era auténtico.
Salimos del hospital al cuarto día y, finalmente, mi Mau abrió sus ojos.
Al fin pude respirar tranquila. Me había quitado un enorme peso de encima.
Hoy mi beba es, ante mis ojos, una hermosa joven llena de vida, de sueños y de alegría.
Siempre ha sido demasiado madura para su edad, demasiado crítica, demasiado perfeccionista y exigente (regañona), demasiado dulce… y mi brazo izquierdo (porque es zurda, jajaja).
Un poco mandona para mi gusto, pero es quien pone orden con el presupuesto y mesura en los gastos.
Comparto, pues, con ustedes esta felicidad que hoy me invade. Deseo tener la dicha de seguir festejando y recordando aquel 13 de septiembre muchos años más.

sábado, 5 de septiembre de 2009

Tragaluz

Dicen que los ojos son las ventanas del alma, y debe ser cierto. Hace 14 años, exactamente el 5 de septiembre de 1995, me convertí en mamá por segunda vez.
A diferencia de mi primera hija, mi Ena (como le digo a mi segunda beba) nació con los ojos bien abiertos. Siempre me ha parecido que los suyos no son ventanas, sino tragaluces o ventanales.
Cuando me la llevaron después de la cesárea iba con sus ojitos puestos en todo (ya sé que al nacer ni enfocan ni nada). A mí me parecía que observaba todo detenidamente. No lloraba, no hacía ningún gesto, sólo “veía” su entorno con una especie de gesto de curiosidad que mantiene 14 años después.
Era una niña extraña (y lo sigue siendo). Dormía casi todo el tiempo, de día y de noche. Apenas despertaba para alimentarse… seguramente estaba reservando sus energías para todo lo que vendría después. Pero otro día les contaré sobre eso; hoy me enfocaré en sus ojos.
Desde sus primeros meses los colores y las formas ejercían sobre ella una fascinación casi mágica. Antes de caminar, habló y una de sus primeras frases completas fue “quelo pintá” (traducción: quiero pintar). Tendría unos diez meses cuando se paraba en su cunita desde las primeras horas pidiendo a vivo pulmón “quelo pintá”. Lo crayones fueron de sus primeros amigos.
Cuando conoció la plasticina, se enamoró perdidamente de ella. Fue amor al primer contacto, de ahí que a sus cuatro añitos montara una exposición escultórica: era una muestra de muebles y otros aparatos que hizo en miniatura.
Para ella la comida más que sabor tenía colores y formas. Pintaba y decoraba su mesita de bebé con espaguetis y frijoles. Luego cada mordida a su tortilla convertía a esta en una figura diferente, lo mismo para el pan, la galletas o la carne. Empezó a pintar en papel, pero no le fue suficiente, por lo que luego vinieron las paredes, los muebles y muchas otras superficies más.
Es una seguidora de la luz. Para ella la noche se hizo para dormir y el día es su principal fuente de energía. Es un espíritu libre para quien la vida no puede transcurrir entre paredes. Es una tragaluz que adora al sol, se nutre con sus rayos. Se la traga con los ojos y luego la convierte en forma y color en todo lo que toca.
Imaginarán que se ha inclinado por la plástica… eso esperaba yo. Es tan polifacética que lleva cinco años estudiando teatro (una de sus más grandes pasiones). Desea ser bióloga, específicamente entomóloga. Y, no es de extrañar, en la actualidad tiene una fuerte inclinación por el diseño de moda femenina. Hata diseñó su propia marca y las vitrinas de sus almacenes.
Es una soñadora, una bella genio con mal genio muchas veces, pero con un corazón grande y generoso. Una líder nata y una payasa de primera marca.
Hoy que cumple un año más de iluminar mi mundo con su luz comparto con ustedes mi alegría de tenerla, la alegría de celebrar su existencia.
Feliz cumpleaños a una de las dos personitas que me han dado vida.

jueves, 3 de septiembre de 2009

Adiós Goushis (2002 - 2009)

Te vamos a extrañar muchísimo. Gracias por toda la alegría con que llenaste nuestros corazones durante tu paso por la vida.

jueves, 27 de agosto de 2009

Pepe y otros agradecimientos

No conozco a Pepe pero me robó el corazón. Es un guatemalteco muy especial, que ama a su país con todo y los habitantes que tiene encima. Tiene una intensa actividad en la Internet y un blog o un montón de blogs, o algo parecido que aparece siempre en muchísimas búsquedas sobre la Guatebuenita.

Y aunque solo me he cruzado con él dos o tres mensajes de correo electrónico, el contenido de lo que dice en ellos y en su blog Chilero me convencen de que se trata de una gran persona.


Hace como un mes me escribió contándome de la maratón de blogs, una actividad que él inició hace cuatro años y que habla mucho de su calidad humana, no porque hable sobre él, sino la forma como él ve a los demás, las cosas buenas que destaca de otros.


Lamentablemente para mí, en ese momento no pude ver y entender exactamente de qué se trataba. Justo en aquellos días mi vida tuvo un giro que me sacó de golpe de la blogósfera, que es el área que a mí más me gusta y envicia de la web.


Hasta hoy tuve un momento para ver de qué se trataba todo aquello. ¡Hasta hoy! Y me encontré con esta hermosa sorpresa.


Mil gracias Pepe, me gustó muchísimo la reseña y tus conceptos sobre las historias citadinas y mis dibujitos. He leído otras reseñas como la del Verde, El último de Paz o Juan Pablo Dardón, y conforme tenga tiempo terminaré mis lecturas.


Te deseo muchísimos éxitos.


Otros agradecimientos


No me alcanzaría el tiempo para poder agradecer acá, públicamente a cada uno de los amigos blogueros que durante todo este tiempo se han comunicado conmigo a través del blog, el correo electrónico y hasta por teléfono, con saludos, preguntas, historias y muchos temas más.
Aunque no he podido responder a la mayoría de mensajes, pues no podía entrar a mi correo ni a mi blog con el tiempo suficiente, lo iré haciendo poco a poco. Por ahora, solo puedo decirles


¡GRACIAS!


Les dejo mi corazón y un apapacho.

¿Eso significa que ya regresé? No lo sé. La verdad es que en estos momentos sigo un poco complicada, pero ya es menos. Poco a poco iré aterrizando de nuevo. Mientras tanto, en mis ratos libres pude avanzar en algunas historias y dibujitos. Asi que mañana vuelven las historias de miedo... ¿adivinen? ¡Por supuesto! de la mano de Aarón.

sábado, 16 de mayo de 2009

Sábados de Mercedes
La ventana indiscreta

Tengo que confesarlo: a mí la literatura no se me da. Pero como ya había hecho un compromiso, pues ni modo, debo cumplir con mi historia para este sábado literario: una actividad que un grupo de blogueros realiza por iniciativa de Mercedes, una increíble escritora.
Y buee, aunque aquí todavía es sábado... en otras latitudes (como España y Sudamérica, de donde proceden mayoritariamente los participantes de esta actividad que hoy conduce Cass) pues ya es domingo. Lo siento mucho, no dependió de mí la publicación tan tardía. Aquí los dejo con mi propuesta para

La ventana indiscreta

Había una vez una familia de ventanas destinadas a la casa de una familia humana. Como todos saben, la indiscreción es parte de la naturaleza de las ventanas, lo llevan en su ADN, por esa razón, los dueños de la casa dispusieron colocar hermosas cortinas para ayudar a la decoración de su vivienda y, de paso, para evitar que su intimidad estuviera en ojos y boca de todo el vecindario.
El ventanal de la sala fue reforzado con un polarizado que permitía ver de adentro hacia fuera pero no a la inversa. Por eso todo lo que allí pasara, allí se quedaría.
En el comedor se colocaron alegres cortinas floreadas que permitían entrar la luz a borbotones, pero que no dejaban salir ni un reflejo.
Los dormitorios, en cambio, no solo fueron decorados con bellos cortinajes, sino que además con prudentes persianas. Y así todas las ventanas de aquella casa quedaron convenientemente vestidas de manera que se vieran decorativas pero sobre todo que protegieran la intimidad de la familia.
Todas, menos una; la más pequeñita e indiscreta: la ventanita del cuarto de baño.
Ubicada en la parte alta de dicho ambiente, la indiscreta ventana tenía pleno dominio del área de ducha, de la tina, el inodoro y el lavamanos. Allí a diario era testigo del streaptease de los miembros de aquella familia… incluso de los momentos más embarazosos.
Aquella pequeña y, en apariencia, inofensiva entrada de luz y de ventilación hizo las delicias del viento que a su paso por el lugar se regocijaba con las intimidades del usuario de turno. La ventanilla indiscreta también proporcionó entretenimiento a los rayos del sol y de la luna que por turnos reían y se divertían con las cosas que los humanos hacen cuando están solos en dicho lugar.
Hasta las aves, los gatos y otros bichos invertebrados que acertaban a pasar por aquella ventana fueron testigos de todo tipo de situaciones que a través de sus cristales podían verse.
Y así la ventanita pasó muchos años divirtiéndose con sus indiscreciones sin que los habitantes de la residencia imaginaran siquiera que mañana, tarde y noche eran objeto de observaciones indiscretas.


sábado, 11 de abril de 2009

Sábados de Mercedes
Quiero tirar al pozo...

La blogósfera es como un bosque encantado lleno de personajes realmente fantásticos, entre hadas, duendes, sirenas y otros tantos más. Mercedes es un hada líder que creó los sábados literarios. Hoy en el árbol de Ardilla Roja me enteré de que estos ejercicios literarios pasan ahora a llevar el nombre de su líder. ¡Enhorabuena!
Y como hoy, sábado de gloria, es día de limpieza general me sumo a los muchos blogueros que siguiendo la línea de los Sábados de Mercedes dispusieron deshacerse de una buena carga de cosas inútiles para tirarlas al pozo.

Quiero tirar al pozo...

1. Los malos libros de historia que toman partido por uno u otro personaje terjiversando nuestro pasado, omitiendo el crédito de quienes escribieron con su sangre otros pasajes del pasado que deben ser estudiados, comprendidos y tomados en cuenta para que no repitamos nuestros errores.

2. Las 10 libras que tengo de más, en virtud de que no tengo voluntad para las dietas ni disciplina para el ejercicio.

3. Las tarjetas de crédito... para no caer en la tentación...

4. A la vecina que roba mis periódicos y que vigila todos los movimientos de las casas de mi cuadra.

5. A unos cuantos testigos de Jehova impertinentes

6. Al gato que por las madrugadas se asoma al patio y hace ladrar como envenenado a mi Juanito... y no deja dormir al vecindario.

7.Mi idea de que todo el mundo es bueno hasta que no me demuestre lo contrario... porque soy incapaz de reconocer cuando la demostración empezó.

8. Al médico que suturó sin anestesia a mi tío Tino, de 82 años, hace unos días.

9. La mojigatería y el machismo, una mancuerna que ha impedido la felicidad de muchas mujeres.

10. Mis complejos, porque a veces no me dejan volar.

sábado, 4 de abril de 2009

Vacaciones de verano


Estaré fuera unos días, lejos de la tecnología y cerca del mar…
Si pasan por este su blog, siéntanse como en su casa. Los invito a leer historias viejitas. También pueden enviarme a mayestatico@gmail..com sus anécdotas para que más adelante las publique. Recuerden que hemos contado travesuras infantiles, metidas de pata, historias divertidas, historias de miedo, etc.
Apapachos,
Nancy

jueves, 12 de marzo de 2009

Corre y va de nuevo

Seth me dio un premio desde su nuevo blog. Tengo que pedir ocho deseos y repartir el premio, pero he decidido no hacer esto último pues me deja en una situación un poco incómoda ya que tengo que elegir entre tantos buenos blogs y no quiero ser injusta. Creo que todos los premios que he recibido los merecen los blogs que visito y que aparecen en la columna derecha como "Mis adicciones".
En cuanto a los deseos, quisiera:
1. Cumplir muchos años más para poder seguir disfrutando la vida con mis hijas
2. Ser más ordenada
3. Conocer la disciplina
4. Cumplir ese sueño de mis papás
5. Tener más tiempo y energía para el Juanito y la Gousha (mis perritos)
6. Ir a ese lugar secreto
7. Dormir un día completo
8. Terminar de modificar y amueblar mi casa




martes, 10 de marzo de 2009

¡Y siguen los premios...!


Ah, en estas fiestas Nancyanas he recibido tantos regalos y sorpresas que no puedo más... jajaja
Chú me dio el premio Palabras como rosas, ¿no es genial? Increíble. Como casi no he estado, no he podido pensar en los futuros premiados... Algún día, jajaja Para mientras, dejo el premio en el Salón de la fama.
Apapachos

¡Guapa!

Estas fiestas Nancyanas me tienen muy feliz. Hoy encontré un nuevo
premio... ejem... es el mismo premio Dardo, pero modificado por Mercedes, quien le puso otra imagen y otro nombre: "Premio a la gente guapa".Acabo de colgarlo en mi "Salón de la fama", jajaja, ese lugarcito en el blog donde tengo los regalitos que he recibido en la blogósfera. Los ocmparto con ustedes, que siempre me acompañan y me hacen sentir escuchada... o, más bien, leída.

Gracias, Mercedes.

Apapachos para todos.

viernes, 6 de marzo de 2009

Sábados literarios
La niña que un día fui

Me acuerdo de la niña que fui y no puedo creer que hayan pasado tantos años. Me acuerdo del Totoy, el oso panda que recibí en mi segunda navidad y que ha estado conmigo desde entonces como mi gran confidente, el guardián de mis secretos, albacea de mis sueños…; me acuerdo de mis primeras Barbies, con las piernas y los brazos tiesos pero siempre coquetas y graciosas; me acuerdo de mis trastecitos de china en los que solía tomar café y jugar de comidita con mis hermanas.
El pobre Totoy ya perdió todo su peluche y aún así lo sigo viendo tan guapo como el primer día, y sigue siendo el confidente de mis sueños; las Barbies están más pálidas, perdieron un par de dedos de las manos, pero con esos vestidos de fiesta se ven tan lindas como cuando jugábamos con mi hermana Vivi y mi prima Liz… y los trastecitos de china sufrieron algunas bajas pero, aunque diezmados, siguen en su cajita original de cartón a la espera de otra cita para un café entre amigas.
-¿Por qué decidiste conservar tus juguetes de la infancia? Me preguntó una amiga el otro día.
No supe qué responder. Quizá ella no entienda que los necesito porque también decidí conservar a aquella niña que un día fui.

___
*Perdón, vine tarde a la cita... espero que no haya problema

domingo, 1 de marzo de 2009

¡Otro premio!

Como si se tratara de un dulce sueño, hace pocos días, el Hada de los Tiempos vino a dejarme un lindo regalo: el premio Dardo. Una distinción con la que «se reconocen los valores que cada blogger muestra cada día en su empeño por transmitir valores culturales, éticos, literarios, personales, etc..., que en suma, demuestran su creatividad a través su pensamiento vivo que está y permanece, innato entre sus letras, entre sus palabras».

Al igual que el premio anterior, hay reglas que cumplir :

1- Aceptar, hacer que el Logo sea visible, respetar las reglas.

2- Hacer un link al Blog que te ha premiado.

3- Premiar otros 15 blogs y avisarles.

Para cumplir con el primer paso, pues ya tengo publicado el galardón en este post y en la columna derecha, junto al Premio al Esfuerzo Personal y otros homenajes que inmerecidamente he recibido de queridos blogueros, tales como la historia con hadas que me regaló el Kontra, los apapachos en décimas de poetas latinoamericanos; el cuento que le pedí a Esteban Dublín y que resultó ser más hermoso de lo esperado, y el cuento que Johan Bush Walls escribió sin que se lo pidiera, pero igual fue una hermosa sorpresa.
En segundo lugar, el premio me lo otorgó el Hada de los Tiempos cuyo blog es
Los cuentos de hadas.

Y para cumplir con la tercera regla, debo escoger 15 blogs para premiar.
Esto último me pone en aprietos pues no me gusta ser jueza de nada y siempre sufro por no poder dar un premio a cada uno de mis amigos de este mundo virtual. Pero bueee, haré un intento por seleccionar 15 blogs. Como es mi costumbre, prefiero hacerlo en orden alfabético, pues no me gusta anteponer unos a otros. Ay, soy una lata para estos menesteres...
Aquí voy:
Les dejo un apapacho feliz
p.d.
Ya sé que se me fue uno de más... pero ¿Qué le voy a hacer? Digamos que no sé contar.

sábado, 14 de febrero de 2009

Sábado literario

Queridos todos,
Quien me conoce sabe que lo mío no es la literatura, sin embargo, me enganché con un proyecto de Mercedes, así que los sábados hago mis pininos literarios intentando producir un cuento cada vez. El de hoy corresponde a la serie "La vida de las cosas", pero por ser el día del cariño había opción de escribir un cuento de amor. El mío, como no estaba preparada psicológicamente, es de desamor.

Los dejo con un
ROMPIMIENTO

¡Eres un tonto! Un tonto y un desconsiderado. Siempre lo he dicho pero mi opinión te vale madre. Conduces como un enfermo mental, abusas del licor, de tus reflejos, de mi motor y de mi diseño reciente. ¿Eres sordo? ¿No oyes cuando mis pobrecitas llantas claman piedad en cada curva que agarras a 100kph? ¿No escuchas mi motor cuando te grito que ya no tengo una sexta velocidad?
¿Acaso eres ciego que no puedes ver cuando te advierto que vas por encima de la velocidad máxima permitida? ¿Eres tan ciego que no ves los pidevías de los demás, los semáforos en rojo, las señales de tránsito en general?
Dices que soy una chatarra que no sirve, cuando me rehúso a cooperar. Me golpeas, me insultas. ¿Qué clase de vínculo podría nacer entre tú y yo?
Lo siento, es hora de terminar. Crees que esta vez sí te desharás de mí y me venderás al mejor postor. Ignoras, pedazo de tonto, que es a mí a quien se le acabó la paciencia. Hoy no arranco. No señor, no se me da la gana arrancar. Te fregaste, te va a salir caro. Aunque te deshagas de mí te voy a hacer pagar caro el trato que me has dado. Esto incluye pago de grúa, pago de taxi para ir a trabajar y el pago del anuncio clasificado (cuyos precios están por los cielos) para venderme.
¿Cómo te quedó el ojo?

sábado, 31 de enero de 2009

MANIFIESTO POR LA SOLIDARIDAD

Si quieres conocer de qué se trata, por favor pincha aquí.

sábado, 24 de enero de 2009

La vida de las cosas:

Desde este lado del espejo te miro y me miras. Observas cómo, según tú, reflejo todos tus movimientos; y yo veo cómo tú imitas los míos. Hasta nos parecemos, somos casi idénticas, de no ser porque tú usas el camino del cabello a la izquierda y yo a la derecha; tú eres zurda y yo diestra. Llevas un lunar en tu mejilla derecha igualito al que yo heredé de mi abuela en la mejilla izquierda.
Me siento feliz cuando veo en ti cómo luce mi nuevo vestido que crees creación tuya, o cuando estrenamos sonrisa… o mirada. Nos hemos hablado quedito, pegadas una a la otra a través de este cristal, hemos ensayado juntas lo que diremos, y sólo tú y yo sabemos que acabamos de dedicar ese guiño a ya sabes quién.


NOTA
Este relato es un ejercicio simpático al que me apunté por curiosidad. La proposición la lanzó en su blog Mercedes. Si están interesados, pinchen aquí.