LEVÁNTATE
Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda. Y al
instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de
reposo aquel día. Juan 5:8-9
Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, y levántate
de los muertos, y te alumbrará Cristo. Efesios 5:14
El pecado nos congela, nos vuelve paralíticos espirituales,
detiene nuestro andar en el propósito y voluntad que Dios ha designado para
nosotros.
Pero, Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo
para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. (1 Juan 1:9).
Así mismo las dificultades, las pruebas y los problemas
pueden paralizarnos, dejarnos estáticos y quitar el gozo que nos ha dado el
Señor, pero Dios no quiere que nos quedemos dormidos, sino que por su Palabra
nos dice que despertemos y nos levantemos. Esto es un mandato de su Palabra que
no volverá a Él vacía, sino que hará lo que Dios quiere que haga, y será
prosperada en aquello para lo que la envió (Isaías 55:11).
No importa la circunstancia que estés pasando, puedes
confiar en lo que dice Dios. Si Él te dice que despiertes y te levantes, que
así sea, primero en tu corazón y luego en tu vida. Toma esta Palabra, así como
se hizo en el paralítico, quien fue sanado e inmediatamente comenzó a caminar.
Levántate de donde estés y empieza a vivir para honrar a
Dios y caminar con Él; porque sin Cristo, así podamos andar con nuestros pies,
somos paralíticos espirituales. Pero de su mano somos levantados para caminar
en victoria. Oración.
Señor, tú me sostienes y por ti puedo caminar correctamente,
ayúdame en mis debilidades y dame la fuerza para seguir caminando en tus
propósitos. Amén. Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra! Usa tus redes sociales para
ese propósito. 