Santiago Posteguillo ha publicado la trilogía narrando la vida de Publio Cornelio Escipión. En febrero del 2008 publicó Las legiones malditas, en octubre de 2008 Africanus el hijo de cónsul y en octubre del 2009 La traición de Roma. He leído los tres durante las vacaciones de Navidad comenzando por Africanus el hijo del cónsul que comienza con el nacimiento de Publio Cornelio Escisión el Africano, sobrenombre por el que le diferenciaban de su padre.
Ha sido divertido, me ha enganchado. He seguido con interés los avatares de la vida del cónsul que además de heredar la fortuna de su padre heredó sus enemigos. Es una historia novelada que sucumbe a jugar a buenos y malos de una manera entretenida. De los enemigos de Escipión destaca Catón el Viejo. Triunfaron en su vida pública y no tanto en su vida privada. Cuando llegan al final ambas vidas guardan cierto paralelismo en su vida privada.
El poder, la amistad, el amor, la familia, la traición, cobran relevancia dependiendo de cada momento de la vida. Siempre me sorprende la necesidad que tienen los hombres de ser reconocidos en su vida social y el poco interés que ponen en la vida familiar cuando al final des sus vidas es esta última la que se encarga de recogerlos y les ayuda a acabar con cierta dignidad. Sin embargo las mujeres permanecen a su lado manteniendo el hogar, los hijos y las relaciones sociales mientras se dedican a conquistar nuevas tierras. El hecho de salir de casa hace que conozcan otras mujeres más jóvenes que acaban sustituyendo a las legítimas en su vida afectiva y amorosa. De hecho prefieren compartir con ellas los últimos años de vida.
Los sentimientos más profundos cambian poco a lo largo de los siglos. Los hombres han escrito la historia, y se sigue dando más importancia a los valores tradicionales para los que el reparto de roles entre hombres y mujeres se presenta como imprescindible. Será interesante ver cómo cambia porque no pierdo la esperanza.
Ha sido divertido, me ha enganchado. He seguido con interés los avatares de la vida del cónsul que además de heredar la fortuna de su padre heredó sus enemigos. Es una historia novelada que sucumbe a jugar a buenos y malos de una manera entretenida. De los enemigos de Escipión destaca Catón el Viejo. Triunfaron en su vida pública y no tanto en su vida privada. Cuando llegan al final ambas vidas guardan cierto paralelismo en su vida privada.
El poder, la amistad, el amor, la familia, la traición, cobran relevancia dependiendo de cada momento de la vida. Siempre me sorprende la necesidad que tienen los hombres de ser reconocidos en su vida social y el poco interés que ponen en la vida familiar cuando al final des sus vidas es esta última la que se encarga de recogerlos y les ayuda a acabar con cierta dignidad. Sin embargo las mujeres permanecen a su lado manteniendo el hogar, los hijos y las relaciones sociales mientras se dedican a conquistar nuevas tierras. El hecho de salir de casa hace que conozcan otras mujeres más jóvenes que acaban sustituyendo a las legítimas en su vida afectiva y amorosa. De hecho prefieren compartir con ellas los últimos años de vida.
Los sentimientos más profundos cambian poco a lo largo de los siglos. Los hombres han escrito la historia, y se sigue dando más importancia a los valores tradicionales para los que el reparto de roles entre hombres y mujeres se presenta como imprescindible. Será interesante ver cómo cambia porque no pierdo la esperanza.