miércoles, 29 de enero de 2020

Lince ibérico y águilas imperiales en la Sierra de Andújar



Águila imperial (Aquila adalberti)


Todos los años se está convirtiendo en un clásico ir a la Sierra de Andújar en diciembre y enero para, coincidiendo con el celo del lince ibérico, tener mejores oportunidades de ver a este amenazado félido al dejarse ver más a menudo a la luz del día.

El 22 de diciembre tuve allí la primera salida de las vacaciones navideñas, aunque por dar variedad a las publicaciones del blog adelanté las dedicadas a salidas esteparias y acuáticas antes de ocuparme en ésta nuevamente de las sierras de Jaén.

Fuimos un grupo bastante nutrido aquel día, no siendo los únicos porque durante esta temporada aumenta notablemente el número de visitantes por el mismo motivo lincero. Teníamos buenas expectativas también de ver aves al ser el primer día que llegaría a despejarse tras la intensa semana de lluvias que tuvimos anteriormente, aunque la mañana empezó fría y nublada hasta que comenzaron por fin las grandes rapaces a desfilar ante nosotros con una presencia muy destacada de buitres negros.


Buitres leonados (Gyps fulvus)

Águila imperial (Aquila adalberti)

Buitre negro (Aegypius monachus)

Buitre leonado (Gyps fulvus)

Buitre negro (Aegypius monachus)

Águila imperial (Aquila adalberti)

Roquero solitario (Monticola solitarius)

Águila imperial (Aquila adalberti)


Acabamos viendo una hembra de lince tras tanta espera, aunque lejana y dándonos la espalda. Pero algo es algo, que la inmensa mayoría de personas no tiene la suerte de ver el félido más escaso del mundo.


Lince ibérico (Lynx pardinus)

Cuando el ambiente estuvo totalmente despejado y soleado las necrófagas continuaron sobrevolando la zona con frecuencia, destacando todavía para nuestra satisfacción los buenos y numerosos avistamientos de buitres negros.


Buitre leonado (Gyps fulvus) casi sin cola

Buitre negro (Aegypius monachus)

Buitre leonado (Gyps fulvus)


Fuimos a comer a la presa del Jándula, lugar donde invernan unos cuantos acentores alpinos y a veces incluso se cita al treparricos. No vimos esas aves pero sí que pudimos observar varias cabras monteses mientras tomábamos el bocadillo y unos dulces de Turquía (yo casi me como toda la caja).


Cabras monteses (Capra pyrenaica)


Delicias turcas

Cabra montés (Capra pyrenaica)

La tarde finalizó tranquilamente sin más avistamientos de linces, aunque muchas otras especies nos tenían entretenidos.


Gavilán (Accipiter nisus)

Ciervos (Cervus elaphus)

Águila imperial (Aquila adalberti)


Las águilas imperiales, que han ido apareciendo en fotos desde el principio sin ser comentadas, nos brindaron a última hora un momento espectacular cuando una pareja pasó volando por el valle y el macho le ofreció a su hembra una perdiz dejándola caer en pleno vuelo para que ella la recogiera.











Mis fotografías no captaron el momento en que se pasan la presa en vuelo, pero sí el vídeo que grabó el amigo Juanra y que muy amablemente me ha dejado colgar en Youtube para compartirlo por aquí.




El 29 de diciembre volvimos por allí, aquella vez sólo cinco personas, con un día espléndido y temperaturas primaverales. Pero, sin embargo, estaba todo muy parado y durante la mayor parte del día no vimos aves rapaces con sólo unos pocos avistamientos de águila imperial y buitre negro.
Conseguimos tener mejores observaciones de linces, aunque muy fugaces y la verdad es que ese día dio muy poco juego.


Ciervo (Cervus elaphus)

Lince ibérico (Lynx pardinus)

He querido aprovechar que estoy publicando sobre Sierra Morena para incluir un águila real que vi en las dehesas cercana a La Carolina y el grupo de alcaravanes que todos los años pasa el invierno en Bailén (mi pueblo).
Después de esta generosa ración de monte mediterráneo tocan otras buenas sesiones de aves acuáticas, incluyendo algunas novedades muy interesantes.

Águila real (Aquila chrysaetos)

Alcaraván (Burhinus oedicnemus)




domingo, 26 de enero de 2020

Excelente vuelta navideña por el Brazo del Este






Tras haber estado en Huelva el 27 de diciembre para visitar las marismas del Odiel decidí pasar aquella noche en Sevilla y al día siguiente seguir con el pajareo antes de regresar a casa.

Así es como el 28 de diciembre pasé una muy agradable mañana de sábado en el Brazo del Este, humedal que me hace tener sentimientos muy contrastados al ser uno de mis sitios favoritos para la observación de aves al mismo tiempo que es escenario del nulo respeto por la naturaleza.
A pesar de su degradación continúa siendo un lugar excelente para ver la mayoría de aves que uno puede encontrar en Doñana y alrededores, como pude comprobar al empezar a circular por sus arrozales.


Garceta grande (Egretta alba)

Calamón (Porphyrio porphyrio)

Cercetas comunes (Anas crecca)

Ahora que vivo en la sierra echo de menos las espátulas, una de mis especies favoritas de las que nunca me canso porque yo sinceramente disfruto mucho más de estas cosas que de ir buscando especies raras.
Y vaya si lo disfruté con la enorme cantidad de ellas que había en las tablas de arroz aún inundadas.




Espátulas (Platalea leucorodia)

Otra de mis grandes favoritas es la cigüeña negra, que como reproductora en Andalucía solamente la tenemos restringida a Sierra Morena con un comportamiento muy arisco y huidizo.
En cambio, durante los meses fríos, llegan ejemplares de otros países europeos a invernar en nuestros humedales y los podemos ver más fácilmente como sucedió con este individuo que encontré con los brillos metálicos de su plumaje al sol invernal.



Cigüeña negra (Ciconia nigra)

Además de los arrozales están los meandros de lo que en su día fue un brazo del Guadalquivir, actualmente separado de su cauce, con su vegetación palustre patrullada por el aguilucho lagunero mientras unos monótonos silbidos delatan la presencia del pájaro moscón.


Aguilucho lagunero (Circus aeruginosus)

Chorlitos dorados (Pluvialis apricaria) y correlimos comunes (Calidris alpina)

Pájaro moscón (Remiz pendulinus)

Aguilucho lagunero (Circus aeruginosus)

Las cañas y carrizos esconden no sólo a los pájaros moscones, también al pechiazul que llegó aquí para pasar el invierno y dar una nota de color a la marisma con el espectacular diseño que le da nombre.


Agujas colinegras (Limosa limosa)

Pechiazul (Luscinia svecica)

Avefría (Vanellus vanellus)

Moritos (Plegadis falcinellus)

Chorlitejo grande (Charadrius hiaticula)

Otra de las especies que tenía especiales ganas de ver es la garcilla cangrejera. Sucede que, al igual que con la cigüeña negra, tenemos una población reproductora estival pero también hay ejemplares invernantes y tuve suerte con uno muy confiado que literalmente se me puso al lado.





Garcilla cangrejera (Ardeola ralloides)
 

Eché en falta ver algún águila pescadora, siendo sustituida su clásica imagen posada en una torreta por la del halcón peregrino. Menos mal que el día anterior sí pudimos ver varias águilas pescadoras en Huelva.


Espátulas (Platalea leucorodia)

Halcón peregrino (Falco peregrinus)

Garceta grande (Egretta alba)

Garza real (Ardea cinerea)

Morito (Plegadis falcinellus)

Después de no haber estado en estos humedales sevillanos desde el pasado mes de julio me sentó de maravilla volver a pasarlo en grande con estas aves que, además, me brindaron unas oportunidades fotográficas muy agradecidas como queriendo darme un buen recibimiento tras tanto tiempo de ausencia.