¡Hola, Bienvenidos!

¡Hola amigos!


Os abro encantada las páginas de este blog. ¡Bienvenidos!

La cocina para mí es entretenimiento, un motivo para relajarme, expresarme, experimentar y hacer disfrutar a quienes prueban mi comida; incondicionales mi familia y amigos (siempre muy agradecidos), tengo motivos para poner pasión en cada uno de los platos que hago, ojalá logre transmitírosla.


Lo dedico a mi madre.

Mostrando entradas con la etiqueta Salsas y cremas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Salsas y cremas. Mostrar todas las entradas

martes, 27 de abril de 2021

CREMA DE ESPÁRRAGOS VERDES

 


 


El mundo de las cremas es fascinante, me valen todas, si son de verduras me apasionan, pero cualquier otra merece un sitio de honor en nuestra mesa.

 

Es tiempo de buenos espárragos, así que es el mejor momento para invitaros a preparar una con ellos.

 

Es tan fácil de hacer y es tanta la satisfacción que se consigue degustándola que no deberíamos privarnos de probarla, y ya puestos hacer cada día una distinta. Muy buena cena y muy buen primer plato para el almuerzo.

 

No os llevará mucho tiempo hacerla, y con disculpas para los puristas hoy paso de añadir quesos y natas.

 

INGREDIENTES:

 

- Espárragos verdes, un manojo.

- Cebolla, media.

- Ajos, 1.

- Patatas, 1.

- Espinacas cocidas, una bolita.

- Pimienta blanca, recién molida.

- Caldo de jamón serrano, 200 ml.

- Leche entera, 200 ml.

- Lonchitas de jamón serrano.

- Aceite de oliva 3 cdas.

- Mantequilla, 1 cda.

- Sal (si se necesita).

 

ELABORACIÓN:

 

Funde a fuego medio la mantequilla con el aceite.

 

Rehoga la cebolla, el ajo y la patata, cortados en trozos medianos.

 

Agrega después de cinco minutos los espárragos troceados menudos (así, al triturar la crema, no se entrapará la batidora). Reserva las puntas.

 

Añade el caldo de jamón y la leche. Deja que hierva a fuego, medio-bajo hasta que se ablande la verdura. Añade las espinacas (para dar intensidad de color a la crema).Tritura y cuela.

 



Saltea las puntas de los espárragos en una sartén pincelada de aceite. Basta con un minuto, para que queden "al dente".

 



Sirve la crema adornada con las yemas de los espárragos y unas lascas de jamón. Si te gusta, pon un hilito de aceite de oliva por encima.




lunes, 23 de noviembre de 2020

CREMA ASADA DE VERDURAS Y MANGO

 


Porque sabéis de mi adicción a las verduras he decidido traeros hoy esta crema que me gusta mucho. Tiene toques diferentes a las clásicas que conocemos. Es fácil de hacer, aunque tiene algunos pasos. Nada que nos eche para atrás ¿verdad? que ya estamos hechos unos cocinillas de primera.

 

Afortunadamente en la tierra donde vivo se cultivan frutos deliciosos como mangos, aguacates, guayabas, papayas, pitayas... y chirimoyos, estos últimos muy característicos de la zona, que por desgracia tienen un tiempo corto. La mayoría de estos frutos se dedican a la exportación, eso me cuentan. 

 

Una de las cosas buenas de vivir aquí es que tienes amigos que los cultivan y muchas veces te regalan, por lo que vas probando con ellos destinándolos a otros usos que no son los estrictos como fruta. Siempre surge una idea que más temprano que tarde pones a funcionar y descubres un plato diferente, distinto a los habituales. Lo das a probar a tus conejillos de Indias y esperas respuesta. Y cuando los oyes preguntar si queda para repetir, sabes que has triunfado, jajaja.

 

No me enredo más y os dejo con la receta, que ya imagino estáis deseando ver cómo se hace y qué lleva.

 

INGREDIENTES:

 

- Tomate prieto grande, 1.

- Berenjena mediana, 1.

- Cebollas morada, 1.

- Cebolla blanca, 1.

- Ajos, 2.

- Mango grande, 1.

- Caldo de verduras o pollo, 250 ml.

- Leche de coco, 1 lata.

- Aceite de oliva virgen extra.

- Orégano, 1 cdta.

- Pimienta blanca molida.

- Sal.

- Albahaca o perejil frescos para servir.

 

ELABORACIÓN:

 

Lava bien la berenjena, el mango y el tomate. Corta la berenjena en rodajas de igual grosor (medio), el mango a la mitad (desechando el hueso) y el tomate lo dejas entero. Las cebollas las pelas y las cortas en rodajas de igual grosor (medio). Los ajos los pelas y los dejas enteros.

En una plancha de asar, aceitada ligeramente, colocas las verduras y el mango. Riega por encima con un hilo más de aceite, y vas asando de un lado y de otro, vigilando que doren al parejo, sin quemarlos. Retiras a un plato lo que esté ya en su punto y sigues girando lo que necesite más tiempo. No pongas sal.


 

  

En una cacerola calientas 3 cdas de aceite de oliva y cuando la verdura y el mango estén asados, los pasas a rehogar, pelándolos previamente y picando en daditos.

 

 

  

Antes de que enfríe la plancha echas medio vaso de agua y con una pala de madera recoges los jugos que han soltado, rascando la superficie. El líquido obtenido se reserva para añadirlo a la crema.

 


  

Una vez que la verdura se ha rehogado y el tomate se ha integrado perdiendo parte de su agua, espolvorea el orégano, y añade el líquido del asado y el caldo de verduras o pollo. Deja que cueza quince minutos a fuego medio. Pon a punto de sal (si lo necesitara) y pimienta blanca.

 

Tritura muy bien para conseguir una crema suave. Después cuela la crema para eliminar las hebras del mango.


Calienta incorporando la leche de coco. Pon a punto de sal.

 

 

Sirve con unas hojas de perejil o albahaca.




viernes, 17 de abril de 2020

SOLOMILLO DE CERDO EN SALSA DE COCO CON CHAMPIÑONES











III   
Después de este incidente he continuado mi paseo sin dar más importancia al hecho. Parece que el viento se quiere apaciguar, lo que produce en mí sensación de bienestar. En veinte minutos habré alcanzado el objetivo propuesto.  Ya aparece en medio del yerbazal la icónica sombra del pasado. Perviven los muros de ladrillo y piedra gris de un  hogar deslabazado y casi siniestro, hoy convertido en cobijo de roedores y de pájaros varios.

Muchos días me invade cierto temor. Cuando el silencio se ha hecho dueño del espacio me parece que recobran vida todos los restos que se desperdigan por el suelo. Es algo que abduce y subyuga. Es difícil de explicar.

Mi paseo concluye al llegar a este lugar. Acostumbro a sentarme en un tronco de olivo que cayó derrumbado por un rayo hace dos inviernos.

Amanecía cuando empezó a llover, a la par era incesante la descarga de rayos que con potentes truenos hicieron temblar los cimientos de las casas de El Sauco. Llegó la tarde, y aún incansable el cielo no consentía cerrarse. Entretanto habría dejado el pueblo inundado y arruinado. Como un lobo feroz que abre sus fauces para tragarse todo a su antojo.

Los vecinos, habían atrancado sus puertas, portones y ventanas. El agua discurría sin control por las calles golpeando en los reveses de las calles los muros de las viviendas. Era inevitable que se levantaran olas amenazantes que alcanzarían objetivos aparentemente inexpugnables.

Sentí la soledad y el abandono. Me consolé al pensar que mis vecinos estarían en iguales circunstancias. Saqué fuerzas de flaqueza para aplacar mi corazón dañado por el peligro y que veía cabalgar fuera de mi pecho tropezando con el mobiliario y las paredes.
  
·-oOo-·

Adivino que os va a gustar esta salsa que hoy le he puesto al solomillo. Quería dejárosla porque a mí me encanta. De paso os digo que combina igualmente bien con pescado, con pasta y arroz. Sola ya está impresionante.

Si estáis aburridos de las salsas de siempre probadla y no dejéis de comentarme lo buena que está.

Ingredientes:

·        Solomillo de cerdo, 1.
·        Cebolla ½.
·        Pechuga de pollo o jamón cocido, 6 lonchitas.
·        Leche de coco ¾ o 1 lata (dependiendo del peso del solomillo).
·        Mostaza de Dijon, 1 cda colmada.
·        Champiñones frescos, 250 g.
·        Queso en láminas fundente (tipo Tranchetes).
·        Pimienta negra molida.
·        Cebollino (optativo).
·        Aceite de oliva.
·        Sal.

Elaboración:

Pica la cebolla menudita y la rehogas en la sartén en 4 cdas de aceite de oliva. Al ablandarse añade la pechuga de pollo en dados parejos y la rehogas un par de minutos (fuego medio).

Incorpora los champiñones limpios cortados en cuatro. Saltea otros dos minutos. Salpimenta.
Retira a un plato y reserva.

En la misma sartén mezcla e integra la leche de coco (remueve antes de usarla) con la mostaza. Desglasa (recupera disolviendo) los restos del sofrito del fondo y las paredes de la sartén.





Devuelve los champiñones a la salsa y deja reducir. Incorpora el queso y deja que se funda totalmente. Cuida que no se te agarre.

Aparte corta unos medallones de solomillo y sella en otra sartén con un poco de aceite, por los dos lados. Salpimenta.




Sirve enseguida napando (cubriendo) por encima con la salsa. Decora con el cebollino picado.







miércoles, 24 de enero de 2018

CREMA DE ESPÁRRAGOS BLANCOS CON SU GUARNICIÓN



Hola a todos! A lo mejor ya ni me esperabais ¡no me lo esperaba ni yo!

A más de un mes que os dejé para tomarme unos días de descanso, vuelvo con vosotros porque me siento comprometida, de alguna manera, con mis seguidores y amigos, de éste, mi pequeño y discreto espacio.

¿Sabéis qué me ha pasado? que se me han ido agolpando multitud de temas, unos buenos, otros no tanto, que unidos a la desidia y el desencanto por continuar con el blog, han hecho que no encontrara el momento de decir: "Vuelvo".

Me he puesto a reflexionar aunque no profundamente, os digo la verdad, se me ha hecho cuesta arriba, y he decidido que, aunque sean diez, doce, quince... las personas que se interesan por lo que publico, ellas han puesto sus ganas en seguirme, se han molestado en abrir una cuenta, o simplemente han pulsado una tecla para decir que les gusta, mostrándome con este hecho su aprecio y cariño, conscientes de que detrás de cada publicación hay un esfuerzo, un tiempo, una ilusión, un deseo de compartir, personas que esperan y les alegra una recetilla nueva, amigos al fin por los que merece la pena continuar. No prometo nada, que todo es posible en la vida, pero de momento algún tiempo me veréis por aquí. Gracias chicos-as.

El otro día hablaba precisamente con una amiga sobre esto y me decía: " No, por favor, no lo dejes, aunque sea publica más espaciado ¡no sabes lo que me ayudan tus recetas! No tienes idea de lo cómodo que me resulta consultar tu página, porque me orienta a la hora de pensar en qué pongo de comer ese día, me enseña platos nuevos y además tus recetas siempre salen bien.

No ha caído en saco roto lo que me dijo, en parte estoy aquí por ella. Por eso hoy le dedico esta crema (que sé que le encantan) porque estoy segura que le va a gustar, más aún cuando vea que es sencilla, con ingredientes fáciles de encontrar, sabrosísima... Para la cena es perfecta, más que completa.

Como llegué "de sopetón" (hablando de cremas y eso, jjj) os pido unos días, mis queridos compañeros, para ponerme al corriente con vosotros.


Ingredientes: (2-3 personas)

- Espárragos blancos en conserva (medianos de grosor) 200 gr.
- Puerro (grande) 1,
- Mantequilla 1 cda, sopera (se puede suprimir).
- Aceite de oliva (he puesto Aceite con azafrán y ajo de La Melguiza, podéis poner otro) 4 cdas.
- Patatas 2 pequeñas.
- Huevo cocido.
- Jamón serrano en taquitos.
- Caldo de la conserva de los espárragos.
- Agua 300 ml.

Elaboración:

Lava el puerro y trocea menudo (corta y reserva unos aros de la parte verde próxima a la blanca, sin desarmarlos). Pela y lava las patatas y córtalas en trozos no muy grandes. Trocea los espárragos escurridos de su agua, guardando ésta para después.

Pon al fuego una cacerola con la mantequilla y tres cdas. de aceite. Funde a fuego medio e incorpora el puerro, los espárragos y la patata. Salpimenta un poquito. Rehoga hasta ablandar el puerro.

Cubre con el caldo de la conserva, más el agua. Cuece hasta que la patata esté blandita (si ha consumido mucho líquido pon algo más de agua cuidando que no quede excesivamente aguada, es una crema).

Tritura y cuela para conseguir una textura más fina.



Saltea juntos el jamón y los aros de puerro en la otra cda, de aceite. Gira con cuidado los aros para hacerlos por el otro lado. Espera que el jamón haya cambiado de color.


Sirve la crema caliente guarnecida con el jamón, el puerro y unas ruedas de huevo cocido. Decora con unas gotitas del aceite sobrante de haber rehogado el jamón.



sábado, 18 de noviembre de 2017

CREMA DE ZANAHORIAS CON NUECES



 

Ya sabéis, quienes me conocéis bien, que soy una adicta a las verduras y que no puedo pasar sin ellas.

Invento una y mil maneras para tomarlas y no cansarme.

Ninguna receta con verduras la hago difícil, hacer un plato con ellas no tiene porqué ser complicado.

Hoy os voy a dejar una de mis cremas favorita, a tope de sana y muy rica. No usaré mantequilla, margarina, ni nata. Es apta incluso para aquellos que tienen problemas con el gluten.

¿Qué os parecería para las cenas?

Ingredientes:

- Zanahorias 5-6.
- Puerro (parte blanca) 1, grande.
- Apio una ramita.
- Patatas 2 pequeñas.
- Caldo de carne o verduras (suficiente para cubrir la verdura y algo más).
- Aceite de oliva 3 cdas.
- Sal (si se necesita).
- Leche de nuez y arroz 100 % vegetal, 1 vaso.
- Nueces.



Elaboración:

Prepara las verduras limpiándolas, lavándolas y quitándoles las pieles. Trocea.

 

  


Ponlas a cocer en el caldo y agrega el aceite de oliva.








 



Tritura cuando estén blandas. Cuela. Añade la leche de nuez y arroz, mezcla todo. Comprueba la sal y si gustas pones un polvito de pimienta blanca.







Sirve caliente con unas nueces troceadas encima.




miércoles, 20 de septiembre de 2017

CREMA DE TOMATE A LA ITALIANA






Empieza a refrescar por el Sur y a veces te quedas destemplado, es entonces cuando nos acordamos de que algo calentito nos puede entonar el cuerpo haciendo que nos sintamos bien. Hemos probado con muchas sopas, caldos y cremas, pero nos gustaría variar, encontrar sabores nuevos. Os propongo esta crema con sabor italiano, económica, sabrosa y reconfortante como la que más. Añadid a vuestra lista de cenas un gran plato de esta crema. Aprovechemos que aún hay buen tomate y no desperdiciemos el momento que se nos brinda. ¿Qué no tenéis "buen material"? podréis suplirlo por conserva, una lata grande de tomate pera os servirá.

Con las cantidades que os doy hoy tendréis para toda la familia y si sobra... ¡no, no puede, no debe sobrar!

Con agradecimiento a mis amigos: Julia, Pepe, Antonio y Francisco por estos tomates fuera de serie que han hecho llegar a mi cocina.😊.

Ingredientes:

- Tomates rojos y carnosos 1’2 kg.
- Zanahorias grandes 2.
- Puerro grande 1.
- Ajos 1 diente.
- Tomillo fresco 2-3 ramitas (optativo).
- Mantequilla 50 gr. (podéis poner, si queréis, margarina o aceite de oliva).
- Harina 1 cda, colmada.
- Caldo de pollo, ternera o vegetal (al gusto) litro y ½.
- Parmesano rallado (imprescindible).
- Albahaca fresca (imprescindible).
- Pimienta blanca.
- Sal (si se necesita).

Elaboración:

Pon a calentar en una cacerola la mantequilla y rehoga, sin tostar, el puerro limpio y troceado. Añade la cucharada de harina y rehoga con el puerro unos segundos. Cubre con el caldo e incorpora el tomillo y el ajo chafado, las zanahorias (sin piel) y el tomate (sin piel) en trozos regulares. Cuece hasta que se ablande la verdura y reduzca el caldo al punto de crema. Tritura y cuela retirando las ramitas de tomillo previamente.


 





Añade una cucharada de parmesano y disuelve.







Sirve con más parmesano rallado por encima y unas hojitas de albahaca.



lunes, 20 de febrero de 2017

CREMA DE JUDÍAS VERDES





Es una de mis recetas favoritas de crema de verdura, los toques que le añado son importantes para conseguir hacerla diferente. Si no queréis ponerlos no hay ningún problema, os saldrá una crema rica y sana, pero ya no será la que os recomiendo, será una más.

Como me gusta que siendo de judías verdes salga con un color verde bonito y no siempre lo conseguimos, a pesar del bicarbonato, del agua hirviendo, de ponerlas nada más cocer en agua helada... ideé triturar la crema con hojas de otras verduras que le aportasen más color y obtuve el resultado que buscaba. No se altera apenas el sabor, claro depende de las que usemos, que pueden ser "potentes", aunque en general tienen sabores neutros. Es mejor no cocerlas, las añadimos al final en el momento de triturar, así tampoco se desvirtúan sus propiedades.

Es una crema totalmente vegetal que sin duda os va a dejar encantados.


 Ingredientes:


- Judías verdes 450 g.
- Zanahorias 3-4.
- Cebolla morada 1 mediana.
- Aceite de oliva 6 cdas.
- Sal.
- Hojas verdes (lechuga, escarola, espinacas, acelgas...) opcional.
- Leche de coco 100 ml.
- Setas ostra empanadas para decorar.



Elaboración:

Despunta las judías verdes y si tienen hebras retíralas. Pela y corta en trozos medianos las zanahorias. Lávalas. Quita la piel a la cebolla, córtala a la mitad.

 

  


Ponlas a cocer en agua hirviendo, ligeramente salada, suficiente para cubrir. Agrega el aceite.







Deja cocer hasta que las verduras se hayan ablandado. Añade las hojas verdes al gusto, según la intensidad de color que desees y tritura el conjunto.

 




En esta ocasión he usado hojas frescas de espinaca.







 




Mientras cuece la verdura empana las setas.


  



Antes de servir añade la leche de coco y la integras. Dispón encima de la crema tiras de seta empanada.


sábado, 31 de octubre de 2015

SALSA BOLOÑESA



 Tocamos Italia con esta salsa, concretamente procede de Bolonia y sus alrededores. No creo que exista alguien que no la conozca en el mundo occidental, pues ha llegado a muchos lugares y hoy todos la cocinan para acompañar a la pasta, en especial a los espaguetis.
Imprescindible se hace también en las lasañas y otras preparaciones parecidas y hasta en ocasiones con otros ingredientes que no tienen nada que ver con la pasta. Se ha convertido en una salsa fundamental pasando a ser familiar en todos los hogares. Para la juventud es una receta imprescindible, no sé qué tiene que gusta tanto a la gente menuda.

Dedico esta receta a aquellos jóvenes que comienzan sus andaduras en solitario, ya independizados, ya por Erasmus, o ya porque un día les apetece preparar su propio plato de pasta, sin la supervisión de un "ojo escrutador a sus espaldas" (tipo Chicote, jajaja...), es un placer para mí pasarles mi receta esperando que les guste, no mucho, muchísimo.


Ingredientes:


- Carne picada mixta (la auténtica receta lleva ternera o buey, no incluye cerdo) 500 g.
- Ajos 2 dientes.
- Cebolla ½.
- Zanahoria 1.
- Apio fresco 1 ramita.
- Perejil fresco 2 ramitas.
- Setas deshidratadas, Boletus (las compro en Lidl) 25g.
- Tomate triturado de lata 400g.
- Azúcar 1 cda.
- Vino blanco: Montilla, Manzanilla, Jerez... 1 copa.
- Aceite de oliva 4-5 cdas. soperas.
- Sal y pimienta molida.


Elaboración:
 




Hidratamos las setas en un bol con agua templada.







 





Ponemos el aceite a calentar y sofreímos en él las hortalizas muy picaditas: ajos, cebolla, zanahoria y apio.






Añadimos la carne al sofrito y esperamos a que cambie de color, sazonando con sal y pimienta.

A continuación, escurrimos las setas y las picamos menudas, agregándolas a la sartén. Tres minutos después ponemos el vino y dejamos que evapore. Incorporamos el tomate y cocemos con una cucharada rasa de azúcar, diez minutos a fuego medio, o hasta que el tomate haya perdido el agua. Rectificamos de sal.


Servimos caliente con perejil picado por encima. Vosotr@s escogéis la pasta.



martes, 22 de septiembre de 2015

CREMA DE CALABAZA Y NUECES




Os traigo una crema muy especial. Ésta es otra alternativa rica y diferente para la calabaza que podéis disfrutar al mediodía, o a la noche.

Ya van apeteciendo platos calientes y las sopas y cremas ocupan un papel principal, tienen su protagonismo en nuestra mesa. La crema de calabaza se suele cocinar por este tiempo y a cada uno le gusta ponerle su toque particular. Con nueces es algo distinto, los sabores se entremezclan y se complementan muy bien. Me gustó el descubrimiento y la pongo de vez en cuando. ¿Queréis descubrirla vosotros también?

Es sencilla y muy saludable y si sustituís la nata por leche evaporada lo será todavía más. Os dejo con la receta. 
 
Ingredientes:

- Calabaza 600 g.
- Ajos 2 dientes.
- Cebolla ½.
- Nueces 12 (peladas o no) y algunas más para decorar.
- Caldo de carne o pollo 1 litro.
- Nata cocinar 1 brick pequeño.
- Perejil unas ramitas.
- Aceite de oliva.
- Sal.

Elaboración:

Ponemos en una cacerola seis cucharadas de aceite y sofreímos en él los ajos y la cebolla. Cuando la cebolla esté transparente añadimos las nueces y dejamos dorar unos minutos. Añadimos la calabaza troceada en dados y la sofreímos también unos minutos.



 




Cubrimos con el caldo. Quince minutos después retiramos y añadimos ¾ de la nata. Trituramos y si queremos que quede más fina pasamos por un colador.






Servimos trazando un corazón con el resto de la nata y decoramos con perejil fresco y unas nueces enteras encima.


lunes, 12 de enero de 2015

CREMA DE RÚCULA CON VIEIRA



Estoy segura que os va a apetecer esta cremita, es muy fácil de preparar y para hacerla más saludable he sustituido la nata por leche evaporada.

Estos días, más o menos fríos, son de comidas que entonen el cuerpo y aunque no voy a tardar en subir comidas algo más calóricas, la de hoy es perfecta para un primer plato de dieta a la vez que reconforta nuestros estómagos.

El sabor de la rúcula casi no se percibe, es muy suave, lo digo por los que no gustan de esta rica hierba, queda muy agradable al paladar, os la recomiendo.

Las vieiras las compro congeladas y ya limpias, siempre salen más económicas que las frescas, Lidl, El Corte Inglés y Alcampo sé que las tienen.

¿Queréis probarla?



Ingredientes:


- 120 g. de rúcula.
- 1 cogollo (pequeño) de lechuga.
- 1 patata mediana.
- 1 cebolleta.
- 1 puerro (la parte blanca).
- 1 paquete de leche evaporada.
- 1 vaso de agua.
- Vieiras (descongeladas) 1-2 por persona.
- Sal.
- Pimienta molida.
- Aceite de oliva 5 cdas.




Elaboración:


Sofreír patata, cebolleta y puerro. Después de cinco minutos incorporar la lechuga y la rúcula, sofreír un rato más. Añadir sal y pimienta. Echar el agua y la leche evaporada. Cocer hasta ablandar la patata, a fuego medio.De necesitar más líquido, añadimos agua en pequeñas cantidades, para no aguar la crema.


Triturar muy fino o colar.


 



Secar las vieiras con papel de cocina para que pierdan el agua de congelación y asarlas en una sartén con un poquito de aceite, un par de minutos por cada lado, a fuego fuerte.







Componer el plato. Servir enseguida.